Este martes, el gobernador regional metropolitano, Claudio Orrego, lamentó la muerte de Karina Morales, practicante del Gobierno de Santiago que fue baleada la semana pasada en Recoleta.
La mujer resultó herida a bala en las cercanías del Mercado Tirso de Molina, cuando un delincuente que se movilizaba en un scooter también lesionó a otras dos personas.
Tras varios días hospitalizada, murió ante la gravedad de su condición. Por ello, Orrego anunció que la querella anunciada por el Gobierno de Santiago será recalificada a homicidio consumado tras la muerte de Morales.
La investigación ya deja un detenido, un ciudadano peruano privado de libertad.
En tanto, un segundo implicado, de nacionalidad chilena, está prófugo.
A propósito de su muerte, el gobernador hizo un llamado a combatir el crimen organizado, que puede afectar a personas inocentes.
“En las últimas dos semanas, en la ciudad de Santiago, han sido asesinadas 16 personas, y hemos tenido 26 homicidios frustrados, todos con armas de fuego. Estamos ante una pandemia de homicidios y de uso ilegal de armas de fuego. Esto tiene que terminar”, aseveró.
Por lo mismo, dijo que “tenemos que unirnos para derrotar al crimen organizado que está asesinando a personas inocentes como Karina”.
“Lo de Karina le puede ocurrir a cualquiera… Estamos hablando de una persona asesinada mientras tomaba un taxi, a plena luz del día, en uno de los lugares más concurridos de Santiago”, agregó.
Luego, insistió en su llamado a “detener esta ola de homicidios a la cual se le han sumado secuestros y extorsiones. Como Gobierno de Santiago no vamos a descansar hasta que los responsables de este delito respondan ante la justicia”.
Finalmente, dijo que estos delitos serán perseguidos sin importar la nacionalidad de los culpables, pero pidió “doble dureza” contra los autores extranjeros.
“Primero en las penas y segundo expulsión inmediata del país. No queremos a personas que vengan de otros lugares a matar a chilenos inocentes”, puntualizó.