Los rojinegros no pudieron ante el equipo de Primera que no perdonó, que se quedó con el clásico del sur, con un merecido 3 a 1 que le entrega la primera opción para quedarse con la llave. Los piducanos tuvieron buen inicio, pero en general se vieron lentos, sin sorpresa en ofensiva y aún sin padrón de juego definido.
Aunque apuró en los primeros quince minutos, y logró establecer la lucha de medio campo hacia el área rival, Rangers no pudo mantener el ritmo, y paulatinamente fue cediendo terreno ante los pupilos de Cristián Arán quienes lograron acomodarse e imponer términos.
De la mano de su nuevo generador, Marco Antonio Medel el equipo celeste manejó las acciones y buscó el juego asociado, principalmente por el centro y la izquierda de su ataque.
En media hora de juego, Gastón Lezcano abrió el marcador desde los 12 pasos, luego de una mano de Bruno Romo. Ganó en confianza y posesión de balón el forastero, con lo cual impedía cualquier sociedad en los rojinegros. Nicolás Trecco buscaba e inquietaba, pero nunca tuvo compañía, ni pudo hacer dupla con Matías Campos.
Para peor, Sebastián Céspedes, quien se mostraba como carta por la derecha no alcanzó a terminar el primer tiempo en cancha por lesión muscular. En todo caso, Joqueín Verdugo ingresó bien y fue aporte ofensivo en el complemento.
La salida de Giovanni Narvaéz por problemas físicos mermó el trabajo de medioterreno del local y los celestes sumaban ataques, que gracias a Iván Bulos ya estaban dos a cero con gol en el inicio de los segundos 45 minutos.
El gol de Bruno Romo, mediante penal luego de la mano de Cristián Torrealba colocó un grado de optimismo para los de Almandoz, pero los pelotazos enviados a Nino Rojas nunca terminaron en reales opciones de gol.
Brian Torrealba aprovechó un centro al segundo poste y colocó el definitivo 3-1 que le otorga la ventaja a los de la sexta región que fueron superiores en la ida, desnudando el débil juego de Rangers que no pudo prolongar su buen inicio. Fue un tema de jerarquía, y nada más.
Fuente: En busca del gol
