Un total de 4 mil 108 hogares están siendo visitados en la Región del Maule en el marco de la Encuesta de Caracterización Socioeconómica (Casen), considerada la principal recopilación de datos del país en cuanto a hogares y población, principalmente en lo relacionado a vulnerabilidad y pobreza, información sumamente relevante a la hora de crear o mejorar políticas públicas.
Debido a lo anterior, el seremi de Desarrollo Social y Familia, Felipe Valdovinos, hizo un llamado a las familias maulinas a abrir sus puertas cuando sean visitados por los encuestadores debidamente identificados, ya que el 3,6% de los hogares catastrados han rechazado participar del proceso, superando la media nacional que alcanza el 2,6%. En el Maule, a la fecha ya han sido encuestadas 3 mil 341 viviendas, lo que significa un 81,3% de avance.
“Hago un llamado a los hogares maulinos a ser partes de la Casen, ya que respondiendo la encuesta podemos reunir información que es clave para implementar más y mejores políticas públicas. Los encuestadores están debidamente identificados e incluso pueden chequear sus datos ingresando a https://casenpandemia2020.cl/”, sostuvo el seremi Valdovinos.
Debido a la crisis sanitaria, este año la Casen 2020 reajustó su mecanismo de aplicación a través de una modalidad mixta secuencial que se dividió en tres fases a cargo del Centro de Encuestas y Estudios Longitudinales de la Universidad Católica.
En la primera etapa se les pide a las familias el número de teléfono (sin ingresar al domicilio cumpliendo todos los protocolos sanitarios). Posterior a ello, se les contacta de forma telefónica entre los meses de noviembre y enero para aplicar el cuestionario que no tomará más de 30 minutos. Por último, se realiza la recuperación de muestra presencial, donde se aplica de forma presencial en los casos que algún grupo específico de la población no haya sido posible contactar de manera telefónica.
PROTOCOLO SANITARIO
Valdovinos recalcó que se trabajó intensamente junto al Ministerio de Salud para tomar todos los resguardos necesarios con el propósito de que las personas puedan responder sin ningún riesgo.
Dentro de los protocolos de acercamiento a las viviendas, se determinó que los encuestadores evitarán tocar superficies, salvo que ello sea imprescindible, como por ejemplo, el timbre, el que posteriormente será desinfectado.
Además el encuestador indicará que no es necesario entrar a la vivienda, ni tampoco que la persona salga de la propiedad, y siempre deben mantener a lo menos un metro de distancia. Los vehículos en los que se trasladan los encuestados serán desinfectados diariamente antes de iniciar la jornada.
