Uno de los apodos mencionados entre la investigación sobre la desaparición del menor de 3 años ha sido el suyo. Denominado como amigo, como cercano y como un desconocido, su historial podría ser fundamental para la investigación.
Lo llaman el “Loco Memo” y es considerado una persona de interés para la investigación del Ministerio Público en el caso de búsqueda de Tomás Bravo. No es sospechoso, pero la policía lo busca para que aclare las dudas de la familia que asegura que, media hora antes que se perdiera el niño, publicó una foto en el lugar en que hoy se busca al menor. Tiene una veintena de causas por robo, agresiones y otros delitos, pero la información a la que tuvimos acceso en las últimas horas, tiene relevancia para una de las cuatro líneas de investigación: es investigado por una causa de abuso sexual.