Durante la madrugada del pasado lunes, un hombre trató de robar el salón de belleza La Casa Coquette, ubicado en el centro de Concepción, región de Biobío.
Al activarse las alarmas del lugar, el delincuentre intentó escapar por la parte trasera y terminó recibiendo una descarga eléctrica.
Poco después, fue encontrado por Carabineros atrapado e inconsciente, siendo detenido.
El hecho ocurrió a eso de las 03:00 de la madrugada. El sujeto, que entró por el estacionamiento del lugar, activó las alarmas del recinto cuando comenzó a destruir inmobilario y sutraer distintas especies.
«Llamaron como a las 03:50 (de la madrugada) porque se había activado uno de los sensores», afirmó Karla Osses, una de las administradoras del lugar, a Radio Bío Bío.
Tras ser alertada, revisó las cámaras de seguridad y se dio cuenta que Carabineros ya se encontraba afuera del salón.
Lo primero en activarse fue una alarma de humo que el delincuente pudo sortear.
«Sin pensar que estas cuestiones pueden pasar dejé una ventana abierta, entonces el humo no fue tan efectivo», relató la administradora.
Al percatarse que Carabineros se encontraba a las afueras del salón, el delincuente no pudo volver a salir por el estacionamiento y trepó por una casa interior a un patio colindante. La propiedad a la que ingresó se trataba de una clínica odontológica ubicada en Aníbal Pinto.
Cuando intentó saltar la reja de la clínica, no esperó encontrarse con un cerco eléctrico y recibió una descarga que lo dejó inconsciente por varios minutos.
Esta vez, se activó la alarma del centro odontológico y fue encontrado por Carabineros: estaba en el suelo, temblando levemente por la electricidad.
«Si no hubiera sido por el sistema de ellos, el gallo se arranca y no encontramos más las cosas», afirmó Osses.
Karla aseguró que el hombre era conocido por los policías y contaba con una orden de arresto pendiente.
«Los Carabineros lo ubicaban súper bien, de hecho le tenían un apodo que no recuerdo. Siempre está metido en esto, me dijeron. Lo toman detenido habitualmente, es súper conocido por ellos”.
Tras la detención, los uniformados le entregaron la mochila del delincuente a la afectada, quien logró recuperar un iPad, secador de pelo, planchas profesionales, onduladores, un parlante y pulseras.
Además, el delincuente se habría guardado en la ropa una máquina para tatuar, un collar, dinero en efectivo y las llaves del balcón del local.
Según el cálculo de Osses, el avalúo de lo que se llevaba el ladrón fluctúa en los dos millones de pesos. Sin embargo, los daños colaterales asociados a los estragos que causó en el inmueble sumarían aún más.
“Quebró una puerta de vidrio, la patió y la desmarcó, entonces eso significa cambiar la puerta entera, unas doscientas lucas. Los muebles también los rompió, entonces esa parte no es menor”, finalizó.
