La Contraloría General de la República reveló una serie de irregularidades tras auditar la Municipalidad de Ñuñoa durante el periodo entre enero y septiembre de 2024, cuando Emilia Ríos, actual subsecretaria de Deportes, ejercía como alcaldesa. Entre los principales hallazgos, el informe detalla problemas en el uso de vehículos municipales, pagos no justificados a funcionarios, deficiencias en la rendición de cuentas y posibles vínculos entre recursos municipales y actividades electorales.
Uno de los puntos más sensibles del informe apunta a un posible nexo entre la gestión municipal y la campaña de reelección de Ríos. Según Contraloría, se constató el uso reiterado de su imagen durante el periodo electoral y publicaciones institucionales que destacaban logros municipales con un enfoque temporal que coincidió con su campaña. Además, el ente fiscalizador señaló irregularidades en contrataciones a honorarios repetitivas y genéricas, así como pagos por horas extras sin registros de asistencia adecuados.
Otro de los hallazgos incluyó bitácoras incompletas y falta de autorizaciones para el uso de vehículos municipales en días inhábiles, así como el empleo de servicios de transporte no regulados, como Uber, que generaron un gasto de 2,3 millones de pesos, ya reintegrados al municipio. Ante estas observaciones, la Contraloría exigió al municipio adoptar medidas correctivas y reforzar los controles internos para prevenir futuras irregularidades.