Chile enfrentó su último examen antes de la Copa de las Confederaciones: frente a Rumania en Cluj y, tras un arranque a toda orquesta, terminó inclinándose de manera increíble.
La Roja entró con todo. A los 7’, Felipe Gutiérrez combinó por aire con Alexis Sánchez, éste controló, cedió al lado y Edu Vargas le metió un bombazo para el primero. Poco después, el mismo Alexis pudo aumentar tras jugada personal pero falló con el sombrerito.
A los 17’, el segundo: gran pase de Gutiérrez a Eugenio Mena, centro, Vargas se la dejó como en un entrenamiento a Leo Valencia y éste facturó para su primer tanto por la selección.
Parecía coser y cantar para el bicampeón de América, pero Hanca avisó con un mano a mano que ganó Johnny Herrera, luego Stancu lo perdió solo en área chica y a los 30’ el mismo jugador clavó un tiro libre perfecto para el descuento. Poco después, se iría expulsado Gary Medel por reaccionar con un patadón a un empujón de Androne.
En el complemento se complicó la cosa. A los 59’, Stanciu sacó un bombazo de distancia que pegó en un palo y se coló en el arco de Herrera. Golazo. Y, poco después, Grozav probó con otro remate de distancia que el portero logró desviar. El mismo volante intentaría tras un centro atrás a los 73’ y falló por poco.
El dueño de casa avisó a los 77’ con un pase profundo que capturó Ivan, quedó solo, canchereó, la alcanzó a sacar Enzo Roco del piso y la opción se diluyó, pero a los 82’ un bombazo de fuera del área no pudo ser controlado por Herrera, la dejó en el área y Baluta convirtió.
Tropezón increíble a menos de una semana de la Copa de las Confederaciones que dejó algunas buenas, como la recuperación goleadora de Edu Vargas, pero dudas en cuanto al control de emociones y otras alternativas.
Fuente: Redgol.com
Fotos: Comunicaciones ANFP/Carlos Parra
