- A juicio de académicos que se dieron cita en evento online convocado por la UCM el pase de movilidad no se ajusta a la realidad epidemiológica local, por lo que resulta contraproducente pensar en medidas que aumentarán la movilidad cuando el foco debiera estar en reducirla. Además, se genera una falsa sensación de seguridad.
¿Se acerca el fin de la pandemia? Esa fue la pregunta que guió el evento convocado por las Facultades de Ciencias Agrarias y Forestales, de Medicina y de Ciencias de la Salud de la Universidad Católica del Maule (UCM) en el que un grupo de cuatro expertos entregaron luces para dar respuesta.
“La vacunación es solo un pilar de la estrategia contra la pandemia” advirtió Alexis Kalergis, profesor titular de la Pontificia Universidad Católica y director del Estudio Científico-Clínico de la vacuna CornonaVac de la farmacéutica china Sinovac.
Kalergis señaló que “hemos aprendido en el estudio en Chile que la vacuna Sinovac es segura e inmunogénica (capacidad de activar el sistema inmune)”. Pero enfatizó en que el efecto de un plan de vacunación no es inmediato tal como se evidenció con enfermedades.
“En los años 60 con la introducción de la vacuna contra el sarampión se observa que tiene un efecto en la disminución de los fallecimientos, pero la morbilidad se mantiene alta por mucho tiempo, así que tenemos que acostumbraron a que, aunque tengamos campaña de vacunación, la circulación el virus va a seguir si no nos cuidamos”, expuso.
Para el científico quien también dirige el Instituto Milenio en Inmunología e Inmunoterapia, “Disminuir la transmisión viral con confinamiento, control de fronteras, aumento de testeo y trazabilidad y aislamiento son factores claves”, afirmó.
En el testeo a nivel regional se logró avanzar gracias a la alianza entre el Hospital Regional de Talca y la Universidad Católica del Maule. El Dr. Ariel Arencibia, académico de la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales UCM y quien participó del proyecto indicó que se ha trabajado en dos etapas, la primera de marzo a agosto de 2020 cuando se pesquisaron más de 17 mil 500 resultados.
“En junio, tanto en lo resultados del Hospital como en los del Laboratorio UCM se presentó un peak de contagios con un 19,11% de positividad”, agregó el científico. Durante la segunda etapa que comprende noviembre de 2020 a mayo del presente año los resultados positivos promediaron un 11%.
“la positividad al Covid en la región se mantiene estable desde diciembre hasta el 20 de mayo, prácticamente estamos en una meseta y eso observamos en las muestras tomadas en ambos laboratorios”, explicó.
INMUNIDAD COLECTIVA Y VACUNACIÓN
A nivel internacional y nacional, la apuesta ha estado en lograr la inmunidad colectiva o de rebaño. ¿Chile la podrá lograr este año? Para responder a esa pregunta, la Dra.Andrea Huidobro, académica de la Facultad de Medicina de la UCM advirtió que, teniendo en cuenta el número R del Covid, es decir, el promedio de personas que puede contagiar un enfermo, se requiere que, al menos el 70% de la población esté vacuna, algo difícil de lograr de acuerdo a las cifras.
Huidobro quien es investigadora del Centro Avanzado de Enfermedades Crónicas, señaló que “En Chile, hay entre un 5 y un 10% de personas que no creen que las vacunas sirvan, si a eso le agregamos que hay de un 10 a un 15% que no están seguros de vacunarse y revisamos que nuestra población es de 19 millones y medio y los menores de edad son más de 3 millones 700 mil, tenemos, con suerte, el 80 por ciento de vacunación porque no se pueden vacunar a los niños”, sostuvo.
La profesora Huidobro hizo un llamado a la ciudadanía “vacunémonos todos cuando nos toque y no solo por un pase sino para ayudar a las personas mayores, a quienes están en tratamiento con quimioterapia, a los inmunodeprimidos, a los niños y a los migrantes quienes son una población muy vulnerable en nuestro país” y añadió que “vacunarse es un acto de caridad”.
Pero, ¿cómo ha funcionado ese proceso? Marisol Salgado, académica de la Facultad de Ciencias de la Salud UCM, destacó el hecho de que el país cuenta con un destacado Programa Nacional de Inmunización desde 1978 y que se realizó una negociación temprana con las farmacéuticas para adquirir dosis de Sinovac, Pfizer, Astrazeneca y CanSino, lo cual provocó una inoculación de forma rápida en diciembre de 2020.
Para la experta UCM, quien tiene amplia experiencia en Atención Primaria de Salud, los fallos de comunicación y de registro y la sobrecarga laboral, están asociadas a errores programáticos que son registrados.
Entre los errores destacan las variaciones en los tiempos entre ambas dosis, derivado de los cambios anunciados. “Inicialmente Pfizer se indicó para un lapso de 21 días y luego se modificó a 28. Igualmente, Astrazeneca pasó de 12 semanas a 29 días y esas indicaciones fueron entregadas de forma tardía cuando ya había iniciado la vacunación, por lo que se genera confusión en el personal de salud y en la población. Inocular dosis de diferentes vacunas, aplicar la segunda dosis antes del tiempo indicado o la inoculación de menores de edad con Coronavac no indicada para esta población, son otras de las fallas”, indicó.
A demás, las particularidades de todas las vacunas que están autorizadas también aumenta el riesgo de error. “Por ejemplo, la vacuna de Sinovac viene en frascos monodosis cuya única dificultad es homogeneizar el contenido; en el caso de la Pfzier requiere dilución de dos mililitros de agua destilada y es un frasco multidosis que alcanza para cinco personas aproximadamente. Y la vacuna Astrazeneca tiene un frasco mutidosis para 10 persona y la dificultad ocurre que cada que abres un frasco el grupo de hombres definido pues está restringida al sexo masculino pues está demostrado que produce flebitis en el sexo femenino”, explicó Salgado.
A nivel logístico, se requiere apoyo de personal de salud que otros organismos como la red municipal de salud; y mejorar la distribución pues solo existe una sola bodega regional con capacidad de almenaje y los días lunes, cuando los vacunatorios locales deben retirar las dosis, se generan retrasos y largas filas.
Indicó también que el anuncio del Pase de Movilidad aumentó significativamente la demanda de vacunas, incluso en un 132% entre personas entre los 50 y 60 años. Con una ocupación de camas UCI sobre el 95% y más de 90 fallecidos al día, la experta advierte que “el pase de movilidad no se ajusta a la realidad epidemiológica local, resulta contraproducente pensar en medidas que aumentarán la movilidad cuando deberíamos enfocarnos en reducirla. Además, genera una falsa sensación de seguridad. Es una buena estrategia para incentivar la vacunación, pero no es el momento de relajar medidas”, puntualizó.