En el encuentro, programado para los dos primeros días del mes de octubre, se abordarán los temas a los que hay que estar atentos para sostener el sector de cara a la próxima década, con el fin de prospectar nuevos mercados y adaptarse a las tendencias de consumo, los efectos positivos y negativos del cambio climático, la modernización urgente de los campos con nueva genética y manejos sustentables, y el financiamiento acorde para enfrentar todos estos desafíos.
El presidente de Fedefruta, Jorge Valenzuela, señaló que la Fruittrade de este año buscará identificar las oportunidades para Chile en el Sudeste Asiático, mercado que demanda la importación de productos como la uva de mesa, manzana, peras y frutos secos, pero donde nuestro país no “participa en la torta”, señala, “por lo que debemos mirar con más detalles las verdaderas oportunidades”.
“Tuvimos un 2018 fructífero, pero necesitamos cargarnos de la energía de todos los actores de la industria, desde los productores, exportadores y empresas que los apoyan, para que este año y la próxima década sean incluso mejores”.
Así partió Valenzuela, el desayuno que el gremio organizó para reunir a fruticultores con expertos y empresas ligadas al rubro, y anticipar los grandes temas con los que tendrá que lidiar el sector para sostenerse en el futuro inmediato y a largo plazo.
Estos temas fueron expuestos durante la jornada, convocada por el presidente del gremio y conformado por el director de Fedefruta Cristián Allendes, el vicepresidente de la SNA Recaredo Ossa, el presidente de Grupo Hijuelas Gaspar Goycoolea, los expertos Carolina Cruz y Dragomir Ljubetic de Uvanova, y Andrés Saez de Capans, además del socio de RedAgricola Patricio Trebilcock.
«Con el Comité Asesor nos tocará un trabajo interesante en términos de cómo mirar la fruticultura hacia adelante, y nos quedamos con los grandes desafíos de lo que se nos viene por el cambio climático, la nueva genética, los nuevos manejos agronómicos y la búsqueda de mercados y consumidores», dijo el presidente de Fedefruta. «Hoy en día el fruticultor tradicional que debe reconvertirse tiene tremendos desafíos en cuanto a la complejidad de cómo está cambiando todo, y las fórmulas que hay que trabajar para anticiparse a los retos, desde mirar el mercado y el rearmar sus huertos modernos, acceder a financiamiento de acuerdo a la realidad de cada uno. De no asociarnos entre pequeños y mediados el panorama se tornará muy complejo, y la asociatividad como concepto siempre lo vamos a empujar. El caminar por estos escenarios implica ser muy profesionales y disciplinados, ser eficientes con el uso de nuestros recursos», lo que se logra con tiempo y paciencia».
Por ello, es que Jorge Valenzuela quiere sentar las bases de estas discusiones en «una Fruittrade nos hará reflexionar y detonar acciones para que nuestro quehacer se sustente».
¿Qué frutas que produce Chile son demandadas en el Sudeste Asiático?
Uno de los pilares, en el encuentro de octubre, será la identificación de oportunidades para la fruta chilena de exportación en países del Sudeste Asiático, como Indonesia, Filipinas, Vietnam, Tailandia y Malasia que cuentan con una población cercana a los 600 millones de habitantes, que demandan justamente productos importados como la uva de mesa, pomáceas y frutos secos, como ha detectado Fedefruta.
“La idea es seguir descomprimiendo los destinos tradicionales”, dijo Jorge Valenzuela en el desayuno de lanzamiento de Fruittrade.
“A ProChile le entregamos un estudio respecto a cómo y qué es lo hay que hacer para empezar a desviar los envíos de fruta hacia el Sudeste Asiático, y al hacer el análisis, nos encontramos con países como Indonesia, el cuarto más poblado del mundo con 255 millones de personas, pero al cual solo exportamos 8.500 toneladas de fruta en 2018, básicamente uva de mesa, y un resto completamente marginal. Entonces, ahí empieza uno a darse cuenta de las posibilidades que existen para nosotros en este mercado”, explicó el dirigente.
Esto, ya que el timonel del gremio explicó que de los 6,4 mil millones de dólares que importa Indonesia de productos de origen vegetal, el 5,3% corresponde a manzanas y peras (US$337 millones) de China, Estados Unidos, Nueva Zelanda, Sudáfrica e incluso Argentina. “No tenemos participación en esa torta y creo que debemos empezar a mirar con más detalle esos mercados”, indicó.