Murió el pasado 9 de diciembre de 2017 y desde entonces su nombre ha provocado una fuerte disputa que involucra a varios actores, desde una asesora del hogar hasta una amante falsa. Es Luis Bravo y su herencia de 7 mil millones de pesos.
Ingeniero civil eléctrico, fue trabajador de la siderúrgica Huachipato de Talcahuano, donde fue despedido con un par de millones como indemnización, los que invirtió en empresas que, luego de años, se volvieron su principal ganancia, permitiéndole adquirir varias otras propiedades y adquiriendo su enorme patrimonio.
Sin embargo, el hombre de 86 años murió luego de tener un matrimonio sin hijos y sin familiares directos a quienes dejar sus bienes, y ahora varios se disputan lo que reclaman como suyo por derecho.
Según reveló La Tercera, una serie de litigios mantienen las posesiones de Bravo congeladas, debido a que algunos reclaman que se les debe entregar una porción de la herencia, mientras que un abogado denuncia que la herencia está vacante.
Según el abogado Gonzalo Camiruaga Pizarro –quien había estado trabajando en ordenar los bienes de Bravo- un testamento que fue rechazado en primera instancia, pero aprobado por la Corte de Apelaciones, asegura que Bravo deseaba que «todos sus bienes fueran distribuidos en partes iguales” entre Nélida del Carmen López Ramírez (su asesora del hogar desde hace más de 40 años), Alejandro Piñeyro, Pedro Rivera, Pedro Cáceres y Octavia Dinelli (todos familiares de su difunta esposa).
Sin embargo, este testamento nunca fue legalizado, por lo que el abogado José Ignacio Castillo Villagra denunció la vacancia de la herencia, lo que le permitiría recibir un premio del 30% de los bienes ($2 mil millones) si se comprueba aquello, dejando el resto para el fisco.
A la historia se suma que una supuesta amante, Rosa Pérez Verdugo, alegó que Luis Bravo había dejado un escrito ante notario en donde dejaba todos sus bienes a disposición de su esposa y su amante, pasando todo a la otra en caso de que una de ellas falleciera. Pero todo quedó en nada luego que se comprobara que todos los documentos no correspondían a este caso.
¿Cuál es el último obstáculo? La madre de Bravo, quien hasta ahora no ha sido comprobada como fallecida y no posee rut asignado. Por lo anterior, hacer la repartición de su herencia es imposible.
