De 65% a 34% se redujo la pobreza multidimensional en Chile. A esa conclusión llegó el académico de la Universidad de Talca (UTALCA), Carlos Villalobos, quien en una reciente investigación determinó esa cifra con base a su reciente medición.
El profesor explicó que las variables o aristas determinadas para este nuevo indicador tienen que ver con aquellos ámbitos que las personas debieran valorar para lograr una situación de bienestar como, por ejemplo: salud, educación, vivienda, trabajo, seguridad social, entre otros. Lo anterior, se aleja el tradicional indicador basado únicamente en el factor monetario como determinante de la pobreza.
En Chile, el Ministerio de Desarrollo Social comenzó desde el 2013 medir oficialmente la pobreza multidimensional. Actualmente, esta medición se realiza en paralelo al índice de pobreza monetaria.
Según el investigador, “el tema de futuro es definir cuál medición va a guiar el accionar del gobierno y sus políticas públicas. Muchos políticos por lo general gustan más del indicador monetario, porque es más fácil de interpretar y manejar. Sin embargo, el indicador multidimensional tiene el potencial de ser una herramienta para el combate contra la pobreza mucho más sofisticada, informativa y en línea con el debate internacional y la agenda 2030 de desarrollo sostenible”, sostuvo el académico.
Además, agregó que “es importante considerar que, para el caso de Chile, cada día las mediciones de pobreza monetaria irán perdiendo espacio, porque cuando en los países, en términos de ingresos, el indicador llega a niveles tan bajos que su medición pierde el objetivo de informar a las autoridades”.
Por el contrario, señala el académico, “las mediciones multidimensionales de pobreza tienen más sentido para la generación de políticas públicas. Por ejemplo, en el primer mundo, aunque existan abundantes ingresos en forma de subsidios que alejan a la población de la línea de la pobreza, hay gente que sigue decidiendo gastar su dinero de una manera inadecuada. Allá se observan familias que viven en casas sin agua o electricidad, o bien, familias que no envían a sus hijos a la escuela, a pesar de que la provisión de educación es gratuita y de calidad. Entonces la pobreza tiene mucho más que ver con el perfil educacional de las familias y cómo estas transforman sus recursos en bienestar”.
Hacia fines de 1980, el Premio Nobel de Economía, Amartya Sen, planteó que hay un importante problema en la medición de la pobreza cuando esta se basa exclusivamente en la dimensión de ingresos. El ignorar el carácter multidimensional sería problemático tanto del punto de vista filosófico como práctico.
Por tanto, el investigador añadió que el problema de la pobreza es mucho más profundo, puesto que traspasa la barrera de lo monetario porque va de la mano de la educación y del entorno. En tal sentido, considera urgente que el diseño de las políticas sea integral e inteligente y basado en la evidencia de estudios empíricos, como el mencionado.
INVESTIGACIÓN
El trabajo realizado por el académico es retroactivo, se basa en hacer una medición de pobreza multidimensional para Chile entre 1992 y 2015, basado en las decisiones normativas que adoptó el Ministerio de Desarrollo Social en su indicador para 2013.
“Mi investigación se basa en la premisa de que la pobreza en un fenómeno multidimensional y por lo tanto es recomendable medirla multidimensionalmente. Este es el enfoque acordado por Naciones Unidas en su agenda 2030 de desarrollo sostenible. Por lo tanto, es importante estar a la vanguardia de la medición usando este enfoque metodológico”, aseguró.
Asimismo, planteó que la asignación de fondos y las políticas públicas deben basarse en un enfoque multidimensional, porque engloba lo que verdaderamente es la pobreza y no solo la carencia monetaria.
“Cada vez existe más acuerdo tanto a nivel filosófico, académico y político respecto a la necesidad de avanzar en este tipo de mediciones y estudiar las implicancias que surgen del uso de este enfoque versus el de pobreza monetaria, cuyo gran defecto es medir un medio y no un resultado”, aseveró.
De acuerdo a las conclusiones de la investigación, al igual que la pobreza monetaria, la pobreza multidimensional ha caído sistemáticamente desde 1992 a la fecha. La población que vive en hogares multidimensionalmente pobres se ha reducido a la mitad en estos últimos años y se están distribuyendo más homogéneamente en el país.
“Producto de políticas públicas, se observan significativos avances en la reducción de la pobreza multidimensional pese a que la economía ha tenido últimamente bajas tasas de crecimiento. La evidencia indica que, en gran parte, esto se debe a las políticas públicas y no es solo el producto del crecimiento económico”, añadió.
Villalobos, ha sido reconocido como uno de los destacados académicos chilenos en materia de pobreza y forma parte del selecto grupo de investigadores que ha sido invitado por la Universidad de las Naciones Unidas (UNU-Winder), en Helsinki, con el fin de discutir los avances en investigación y su relación con la agenda 2030 de desarrollo sustentable de Naciones Unidas.
El académico ha presentado recientemente su trabajo en jornadas académicas en Oxford Poverty & Human Development Initiative (Ophi), de la Universidad de Oxford, en donde mostró su evidencia sobre la dinámica de la pobreza multidimensional durante el periodo estudiado (1992-2015), en el cual referencia el carácter divergente que existe entre la medición multidimensional y monetaria de la pobreza.
