«Desgraciadamente, en muchos casos, ese tiempo de cicatrización termina favoreciendo la impunidad de agresores y deja crímenes sin castigo, por haberse cumplido los plazos que la ley contempla».
Con esas palabras, el Presidente Sebastián Piñera explió este jueves su decisión de presentar una indicación sustitutiva a un proyecto de ley existente en el Congreso, en la cual establece la imprescriptibilidad total de los delitos sexuales en contra de menores de edad. Es decir, estos no perderán la posibilidad de ser perseguidos por el mero paso del tiempo.
La decisión del Jefe de Estado procede en virtud del caso Ámbar que, en palabras del propio Piñera, «no tuvo la oportunidad de desarrollar su vida y no solo porque una persona que no sé si merece llamarse persona, abusó de ella y le quitó su vida».
En esta línea, el Mandatario agregó que «no hay atentado más miserable cobarde contra la vida y la inocencia de nuestros niños que los abusos sexuales. No sólo hieren su cuerpo, dejando profundas heridas en su alma. Dolorosas huellas que no solo marcan vida para siempre, también la de su familia, amigos y la sociedad entera».
Paralelamente, en la instancia estuvo presente James Hamilton, una de las víctimas de abuso por parte de Fernando Karadima, quien llegó a Chile en la mañana de esta jornada, tras reunirse en El Vaticano con el Papa Francisco, quien le pidió disculpas a él, junto a Juan Carlos Cruz y José Andrés Murillo.