Ángela Vivanco habló por primera vez sobre su vinculación con el llamado “Caso Audios”, después de haber sido suspendida de la Corte Suprema tras la divulgación de mensajes que la relacionan con el abogado Luis Hermosilla, quien actualmente se encuentra en prisión preventiva como principal acusado en este proceso judicial.
En una entrevista con T13, la exministra expresó que está viviendo un periodo “muy duro, muy desgastador” y que en este momento está concentrada en su defensa desde “diversos frentes, con pocos recursos, poca información y limitadas vías de comunicación”.
Sobre sus interacciones con Hermosilla, Vivanco comentó que “todos los que tenemos alguna relación con el señor Hermosilla estamos bajo cuestionamiento”, y añadió que, desde que el caso se hizo público, “siempre pensé que existía la posibilidad de que los mensajes salieran a la luz”, lo cual le generó preocupación por “cómo podrían ser interpretados”.
Enfatizó que “esos mensajes se dieron en un contexto de conversaciones a través de WhatsApp, que evidentemente no estaban destinados a ser públicos”.
En cuanto a su solicitud de apoyo al abogado para su nombramiento como ministra de la Corte Suprema, aclaró: “No le pedí a Hermosilla que intercediera ante el presidente para que me nombrara. Mis conversaciones con él siempre fueron sobre el avance de mi candidatura”, aseguró.
Respecto a las acusaciones sobre presuntas aceleraciones en la resolución de causas, Vivanco señaló que “nadie parece estar preocupado por las enormes demoras en el sistema judicial”. Explicó que, por instrucción del presidente de sala, Sergio Muñoz, ella se encargaba de gestionar los tiempos de tramitación de los casos.
