El registro de denuncias durante el año 2020 da cuenta que sólo un total de 10 personas en toda la Región del Maule denunciaron haber sido objeto de una estafa al momento de retirar algún bono del Estado. Pero el 2021y sólo desde enero hasta el 31 de julio pasado, la cifra aumentó a 44 víctimas.
Ante esta situación la Fiscalía, Carabineros y la Policía de Investigaciones (PDI) han reforzado las acciones a seguir a fin de lograr dar cuenta a la comunidad de la forma en que operan estos sujetos, muchas veces sentados frente a un computador creando páginas falsas o bien abordando a las víctimas para estafarlas a las salida de cajeros automáticos o entidades financieras.
Al comparar los años 2020 y 2021, según los casos registrados sólo en las capitales provinciales, las cifras dan cuenta que el año pasado Curicó tuvo dos casos y el primer semestre de 2021 lleva diez casos; Talca pasó de tres casos a tener 16 entre enero y julio de este año; Linares no tuvo casos el 2020 y el presente año ya suma siete casos; mientras que Cauquenes presenta un caso de estafa en lo que va de 2021 (el año pasado no registró).
El resto de las personas afectadas se focaliza en las comunas de Constitución, Molina, Licantén, Parral y San Javier.
DE TODO TIPO
El fiscal jefe de la Fiscalía Local de Talca, Héctor de la Fuente señaló se trata no solamente de los IFE, sino que han tenido aproximadamente 300 denuncias por estafas de todo tipo.
“Nos llama la atención y nos preocupa la incidencia social que tiene el que las personas han recibido el ingreso familiar de emergencia puedan verse afectadas por la actuación de algunas personas que se vienen a apropiar de estos dineros, con la consabida afectación”.
“La cantidad numérica pareciera menor en relación con otros delitos, sin embargo ha significado en este primer semestre un aumento aproximadamente de un 400 por ciento. Durante todo el año 2020, solamente asociado a los bonos, a los ingresos familiares de emergencia, tuvimos tres casos, y ya en este primer semestre, llevamos 16 casos exclusivamente asociados a ese tipo de forma de adquirir dinero sin perjuicio de otros delitos en los que se han visto involucradas las personas”, sostuvo el fiscal de la Fuente.
Por su parte el jefe de la Brigada Investigadora de Delitos Económicos (Bridec) de la PDI Talca, subprefecto Juan Carlos Moya señaló que “estamos abocados fundamentalmente a un trabajo en conjunto con el Ministerio Público, relacionado con investigaciones que son derivadas en este tipo de hechos que afectan a las familias que reciben tanto el IFE como han retirado su 10 % de los banco”.
MODUS OPERANDI
Con respecto al modus operandis, el subprefecto Moya explicó que los delitos radican fundamentalmente en engaños para solicitar claves telefónicas, donde las propias víctimas son quienes entregan sus antecedentes a terceros o extraños que se hacen pasar como agentes de bancos o ya sea algún familiar que por whatsapps solicita algunas claves.
“Por lo tanto el llamado es a las personas para que no entreguen claves ni números que lleguen a sus teléfonos, ni reciban llamados de desconocidos o personas que se hacen pasar por agentes de bancos, toda vez que estos son los medios que hoy día están utilizando para poder estafar y quitarles el dinero de las cuentas”, precisó el jefe policial.
A su turno el prefecto de Carabineros de Talca, coronel Álvaro Escobar, señaló que mantienen un trabajo permanente con la fiscalía.
“Nuestro trabajo esencial es la función preventiva, por lo tanto, tenemos servicios permanentes, fiscalización de bancos, recorridos por las principales líneas bancarias, con la sección canina, personal montado y todos los servicios que podamos desplegar para la función preventiva”, enfatizó.
Finalmente, las tres instituciones hicieron un llamado a las personas para que estén atentas ante estos posibles ilícitos y a esta denunciar de forma inmediata si se ven afectados, a fin de poder contar con todos los antecedentes lo antes posible y lograr de esta forma determinar responsabilidades.