Los trabajadores de la empresa que construye la nueva cárcel de Talca, en el sector de “Aldea Campesina”, pidieron retomar sus labores y junto con eso, quitaron todo respaldo a la “toma” de los terrenos liderada por el presidente de uno de los sindicatos de obreros.
Gran parte de los operarios se reunió este mediodía en la Plaza de Armas de la capital regional, a fin de explicar lo que consideran el real conflicto que hoy mantiene paralizadas las faenas.
Luis González, uno de los funcionarios, manifestó que el mencionado sindicato “nos metió la mano en los bolsillos y ha causado un gran daño a la empresa y a todos nosotros. Nosotros queremos volver a trabajar, no estamos en contra de la empresa”, aseveró.
Acotó que detrás del conflicto hay una “organización mafiosa” que se dedica a generar problemas en empresas extranjeras que tienen contratos con el Estado para sacar provechos personales.
“Este sindicato se organizó hace poco y el delegado estuvo mucho tempo esperando que lo llamaran a trabajar y cuando lo consiguió, de inmediato empezó a formar el sindicato y luego a actuar para conseguir lucro personal y no la restitución de trabajadores supuestamente despedidos”.
El trabajador fue más allá y acusó que ha llegado gente externa a apoyar la “toma”. “Es gente pagada por el sindicato inter empresas, con estadía en Talca, con el fin de generar temor en la empresa”.
González señaló que hay cerca de 800 personas afectadas por el conflicto, los que desean volver pronto a sus puestos de trabajo.
Por su parte Aliro Marabolí, otro de los funcionarios, dijo que los trabajadores no comparten el movimiento y negó que haya prácticas antisindicales o despedidos arbitrarios e ilegales como ha acusado el dirigente cuestionado. Explicó que quienes dejaron la empresa (86) tenían contratos a plazo fijo, que por tanto sabían el término de su vinculación con la empresa.
“Lamentablemente, (con esto) se generó la situación para que se formara el grupo y ellos son los que tienen tomada la cárcel”. Apuntó que prácticamente nadie de los trabajadores que salieron de la empresa por término de contrato está apoyando el movimiento.