La Universidad Católica del Maule (UCM), plantel joven, con tradición y visión de futuro, desde hace un año que cuenta con el Programa de Apoyo y Recursos para la Inclusión (PARI), -bajo el alero del Centro de Apoyo al Aprendizaje (CAP)- cuyo objetivo es apoyar el proceso de adaptación a la vida universitaria y acompañar a los estudiantes en situación de discapacidad, desarrollando sus habilidades y competencias en diferentes ámbitos.
Uno que se verá muy favorecido con el PARI UCM es Felipe Silva, joven con movilidad reducida, quien ingresó a Ingeniería Civil Informática gracias a los 631 puntos que obtuvo como ponderación total.
“Desde un comienzo el proceso fue súper ameno, porque tuve todas las facilidades para desplazarme y cumplir como corresponde. Fue simple y sin mayores requisitos o trámites”, contó sobre su matrícula, la cual la realizó acompañado de su madre, quien confesó que desde los ocho años se puso como objetivo estudiar una carrera vinculada al área informática, ya que “siempre busca arreglar muchas cosas”, contó.
“Felipe es un buen alumno y eso ayudó a que todo fuese más fácil. Su discapacidad tampoco es un problema, todo lo contrario. Todo el trámite lo hizo él, yo solo me dediqué a observarlo y apoyarlo. Ha sido muy independiente”, complementó Johana Poblete.
Felipe, quien fue beneficiado con gratuidad, señaló que espera formar parte de todo lo que contempla la vida universitaria, como también cumplir con todos sus deberes como estudiante.
“Estoy pensando en prepararme durante el verano con las asignaturas más complicados que tiene la carrera. Siempre fue mi primera opción ingresar a la UCM”, confesó.
PARI UCM
Teresa Núñez, coordinadora del PARI UCM, destacó los buenos números que tienen este año, ya que aumentaron en un 50% la cantidad de estudiantes que ahora forman parte de la comunidad UCM.
“Estamos siendo un apoyo importante para los jóvenes en situación de discapacidad, nos están prefiriendo como universidad”, comentó.
Asimismo, Teresa indicó que “cumplimos un rol de acompañamiento con los estudiantes, en este caso, hasta su egreso. Les entregamos las herramientas tecnológicas que necesitan, activamos redes como, por ejemplo, el Servicio Nacional de la Discapacidad (Senadis), donde les ayudamos a postular proyectos”, dijo.
De hecho, para este 2018 cuentan con uno –se adjudicaron 10 millones de pesos- a través de Senadis para la implementación de la Zona de Recursos para la Inclusión –ubicada en el tercer piso del Edificio de Aprendizaje Autónomo del Campus San Miguel.
“A partir de este año comenzamos un trabajo fuerte junto a los programas de integración de los colegios, para que los jóvenes de tercero y cuarto medio sepan de las distintas alternativas que tienen, además de seguir fortaleciendo la Admisión Especial que tiene la UCM”, comentó Teresa Muñoz.
Finalmente, la coordinadora del PARI UCM, explicó que el apoyo abarca “desde los ajustes curriculares que puedan necesitar, hasta la búsqueda de recursos económicos”, concluyó.