¡Que levante la mano quien no conoce o no tiene un familiar en situación de discapacidad!
En la región muy pocos podrían hacerlo porque el II Estudio Nacional de la Discapacidad establece que el 20,2% de la población adulta del Maule son personas que, en relación a sus condiciones de salud física, psíquica, intelectual, sensorial u otras, al interactuar con diversas barreras presentan restricciones en su participación plena y activa en la sociedad.
De acuerdo a este estudio y el Censo abreviado -aplicado el 2017- proporcionalmente más de 155 mil personas en la región del Maule se encuentran en situación de discapacidad.
Una población difícil de ignorar, más cuando están siendo cada vez más partícipes de la sociedad que los rodea, exigiendo sus derechos y utilizando espacios públicos para ser visibilizados con el objetivo de generar cambios cuyo único propósito es alcanzar la “participación plena y activa en la sociedad”.
Para lograr que esto ocurra debe suceder un cambio más profundo en las políticas públicas que contribuyan primero a lograr una accesibilidad universal.Condición mediante la que un entorno es plenamente accesible a todos los individuos, sin importar si estos sufren de alguna discapacidad que dificulta su desplazamiento.
AVANZANDO EN LA INCLUSIÓN
Angela Gajardo, directora subrogante del Servicio Nacional de la Discapacidad en el Maule asegura que desde la promulgación de la Ley 20.422 en el 2010 surge un cambio en las acciones que como Estado se inician para “asegurar el derecho a la igualdad de oportunidades de las personas con discapacidad, con el fin de obtener su plena inclusión social, asegurando el disfrute de sus derechos y eliminando cualquier forma de discriminación fundada en la discapacidad”.
Gajardo explica que la ley en sus distintos reglamentos establece acciones para garantizar una inclusión en sectores relevantes de la sociedad como el laboral, la educación, el deporte, las artes, la cultura, vivienda y en todas áreas y sectores del quehacer de las personas.
Un importante avance es lo que comienza a partir de abril del presente año con la aplicación de la Ley de Inclusión Laboral de las personas en situación de discapacidad asegurando puestos de trabajos para este importante sector de la sociedad.
FONDO DE PROYECTOS INCLUSIVOS
Entre los meses de mayo y Junio Senadis está promoviendo el Fondo Nacional de Proyectos Inclusivos que entre sus áreas de financiamiento se encuentra el acceso de las personas con discapacidad al deporte en áreas tan diversas que van desde la formación con talleres hasta la alta competencia paralímpica.
Desde el servicio se informó que existe una mesa de trabajo con los distintos organismos del Estado para asegurar el acceso a los espacios físicos en los que se practica deporte con el objeto que de no tener se generen los recursos e intervenciones para garantizar su uso por parte de las personas con discapacidad.
Aquí surge nuevamente la accesibilidad universal a la que nuestro país se ha comprometido. Pero ¿cuál es ese compromiso que asumió el Estado?
“La accesibilidad universal abarca más allá que solo el diseño adaptado para las personas con discapacidad, incorpora a todas aquellas personas que puedan tener algún tipo de barreras en el entorno que impide su participación. Estamos hablando de adultos mayores, embarazadas, personas con obesidad mórbida, ya que de esta manera se establece una línea de trabajo en la cual a través del diseño universal todas las personas en diferentes situaciones pueden acceder en igualdad de oportunidades a edición públicos, a espacios públicos, espacios culturales, edificios de uso público, etcétera”.
Pero qué entendemos con “participación plena y activa en la sociedad”. (Cuéntanos qué es para ti)
