Tras el episodio vivido entre un carabinero y un conductor de Uber, la semana pasada, William Arévalo, alcalde de la comuna de Santa Cruz, en la provincia de Colchagua, Región de O’Higgins, hizo un llamado a las autoridades a redoblar los esfuerzos, poner mano dura y retomar la cultura de enseñar educación cívica en todas las etapas.
“Si no aprovechamos este momento para trabajar en el respeto a nuestras autoridades, nos transformaremos en un país anárquico, lleno de vicios y donde el desgobierno parecerá una práctica habitual. Ojalá el Estado tome el incidente en el aeropuerto como una señal potente para trabajar en materia educativa”, comentó el edil.
Arévalo también cree que los medios de comunicación deben jugar un rol importante, “ya que vi muchos estelares hablar de ‘pacos’ y ningunear el trabajo de Carabineros. Por eso enviaré una carta al consejo nacional de televisión y espero reunirme en los próximos días con el ministro de Educación para renovar el respeto a Carabineros desde los más niños” destacó.
El jefe edilicio, que además es presidente de la gestión de Riesgos Locales de la Asociación de Municipalidades de Chile (AMUCH) cree que en gran parte el incidente que se vivió entre Carabineros y el chofer de Uber se debe al mal mensaje y manera con que algunos programas de televisión como CQC, se refieren a las fuerzas policiales de nuestro país.
En tal sentido Arévalo propone endurecer las penas para quienes infrinjan la ley y desacato a la autoridad, pero también plantea que el Ministerio de Educación intervenga en las salas de clases.
“La educación cívica debe ser obligatoria. Hay que hacer entender a nuestros niños que existen normas, a veces tácitas, que deben aplicarse en toda la vida. Tenemos deberes y derechos que seguir. Lo que hizo es señor del Uber es algo que no puede ocurrir nunca más”, argumentó.
Por último el alcalde santacruzano le pide al gobierno intervenir no sólo en los barrios complicados de Santiago, “porque ésta debe ser una estrategia regional y nacional. Esto se repite en muchos lugares de Chile, pero en las regiones estamos más invisibles”, finalizó.