Una entrevista en la que el presidente Sebastián Piñera aseguró que existe evidencia concreta de intervención extranjera en el estallido social se viralizó durante este miércoles en redes sociales.
Las declaraciones del mandatario fueron realizadas como parte de una entrevista concedida a CNN en Español y realizada por el periodista y escritor Andrés Oppenheimer el pasado 11 de diciembre.
En la entrevista el mandatario afirma que desde el gobierno realizaron “un estudio de millones y millones de comunicaciones a través de redes sociales”, y que encontraron que “muchas de ellas vienen de fuera de Chile, la inmensa mayoría de ellas son para provocar más desorden, más manifestaciones, más descontrol, más desobediencia civil”.
El propósito, afirmó, sería el de “castigar o hacer perjudicar al sistema político chileno, no solamente al gobierno, si este es un ataque contra el sistema político, y ahí participan grupos en nuestro país, como por ejemplo grupos de narcotraficantes, grupos anarquistas, pero también hay una mano extranjera”.
“Muchas de las noticias, de los videos relacionados con derechos humanos, que se han difundido profusamente en los medios de comunicación chilenos y también extranjeros, no corresponden a la realidad. Hay muchos de ellos que son falsos, que son filmados fuera de Chile, o que son tergiversados”, aseguró.
En la misma línea, aseguró que “aquí hemos debido enfrentar una campaña de desinformación que es muy difícil de contrarrestar, porque ha habido poca capacidad de los medios de comunicación de verificar la verdad”.
Entre las noticias falsas, el mandatario mencionó el caso de la muerte de José Miguel Uribe en Curicó, en el que inicialmente se había sindicado a un militar como el responsable, sin embargo, la investigación dio un vuelco y se determinó que el disparo fue efectuado por el arma de un civil.
“La Fiscalía determinó que no era así. Que eso que había sido profusamente difundido, el que había matado a un chileno no había sido el militar, sino que había sido una banda rival. Como eso hay muchos ejemplos”, dijo, aunque en realidad el Ministerio Público formalizó a un empresario de la zona y no a un integrante de una “banda rival”.
Acusación constitucional
En la conversación el mandatario fue consultado por la acusación constitucional en su contra que por esos días tramitaba la Cámara de Diputados, y que el pasado 12 de diciembre no alcanzó a ser votada debido a que la mayoría de los parlamentarios aprobó la cuestión previa, es decir, los alegatos de su defensa.
Piñera se manifestó confiado y aseguró que “estoy convencido de que no va a prosperar, esa fue una presentación que hizo una minoría de la Cámara de Diputados, básicamente el Partido Comunista y algunos sectores de extrema izquierda, pero no va a prosperar porque no hay ninguna razón para que prospere“.
Con respecto al trasfondo de la acusación, que sindicaba que existe responsabilidad política del presidente en las violaciones a los derechos humanos que han ocurrido tras el estallido social en el país, afirmó que “estamos muy claros de que en esta materia, nuestra larga tradición en Chile, después de lo que conocimos durante el régimen militar, de un compromiso y un respeto total absoluto por los derechos humanos de todos en todo tiempo y lugar se ha mantenido“.
“Ahora, ¿que se cometieron excesos? Claro que sí. Hay 60 mil carabineros que han tenido que enfrentar a más de 3 mil, 4 mil incidentes de mucha violencia y hubo atropellos a los derechos humanos y están siendo investigados por la Fiscalía Nacional y van a ser juzgados por los tribunales de justicia como corresponde en democracia”, agregó.
“Y quiero decir también, yo lamento cada uno de los muertos. Cada uno de los heridos. Pero no solamente han habido heridos y lesionados en los civiles. Hay más de 2.500 carabineros heridos.Algunos de ellos heridos a bala, quemados con bombas molotov. Y, por tanto, la violencia que conocimos en Chile fue de una magnitud, de una intensidad que nunca antes habíamos conocido”, cerró.