A la edad de 91 años falleció ayer el sacerdote Florentino Molina Farías, el último capellán que tuvo el Hospital Regional de Talca.
El padre Florentino nació el 9 de agosto de 1927. Hijo de Romelio Molina y de Clementina Farías. Fue el quinto de 10 hijos que tuvo este matrimonio.
Fue ordenado sacerdote por monseñor Carlos González Cruchaga el 18 de abril de 1973. Su primera destinación sacerdotal fue como Vicario Cooperador de la parroquia Nuestra Señora de Fátima y de todas las parroquias de Talca.
En julio de 1984 fue nombrado párroco de la recién creada parroquia Los Doce Apóstoles, en el sector La Florida de Talca. En junio de 1989, fue nombrado Vicario Parroquial de la parroquia de San Clemente. Seis meses más tarde, toma posesión de la parroquia San Sebastián, en el populoso sector de la población Carlos Trupp de la capital maulina.
Su última designación la desempeñó como capellán del Hospital Regional de Talca, cargo que asumió en marzo de 2003. Debido a su edad y estado de salud, los últimos meses estuvo atendido en la casa de acogida del “Padre Manolo” de Talca.
Sus funerales se esta tarde, en el cementerio municipal de Talca.