Uno de los imputados por el homicidio del pequeño Emilio de Longaví (12), ya había cometido el mismo delito en 2009. Gerald Repetto (27) fue condenado por asesinar a su padrastro cuando aún era menor de edad.
“Ocurrió el 10 de noviembre de 2009 con un balazo en la espalda. Mi papá (Pedro) le estropeó un celular a Gerald, quien dijo que la escopeta había caído a la mesa y se disparó sola”, comentó Carolina Oteíza, hija del hombre asesinado por Repetto.
Por aquel hecho, Gerald Repetto estuvo con libertad vigilada. Aún así, siguió cometiendo varios episodios de violencia, situación que no es extraña para sus familiares.
“No me extraña que una persona como él haya cometido un crimen tan horrendo. Desde chico siempre tuvo anomalías en su personalidad, las que debieron ser tratadas por su madre”, confesó una hermanastra de Gerald.
Desde que ambos imputados llegaron a Longaví, sus vecinos tuvieron una mala sensación. “Desde la primera vez que los vi pensé que no eran buenas personas. Sólo con verlos se notaba”, relató un hombre del sector.
Por el momento, los sospechosos permanecen en la cárcel de Cauquenes, esperando la formalización que se realizará durante la jornada del martes.
Mientras esperan el actuar de la justicia, la familia y vecinos del sector están dándole el último adiós al pequeño Emilio de 12 años.
