Se trata del menor de 16 años de edad quien el 30 de agosto del año 2018 dio muerte a Ignacio Canales Hernández, al interior de una casona abandona en Linares tras propinarle un tiro directo en su cabeza, falleciendo en el lugar.
Tras una larga investigación encabezada por el Ministerio Público y a cargo de la Brigada de Homicidios de la PDI, se pudo establecer y acreditar la participación del menor acusado, quien junto a otros dos adultos -que también fueron condenados por el tribunal- habrían cometido el homicidio.
La fiscal Carmen Gloria Camaño a cargo de la causa y de presentar los antecedentes en el juicio, señaló que, «el tribunal oral en lo penal de Linares condenó a los tres sujetos que cometieron el delito, luego de una investigación larga, pormenorizada y que planteó múltiples inconvenientes», detalló.
Sostuvo además que finalmente la fiscalía logró sostener ante el tribunal la tesis en contra del adolescente como autor del delito de homicidio calificado, y por el cual el tribunal le condenó a una pena de 7 años.
«Es necesario recordar que la pena máxima que registra nuestra legislación penal sustantiva en el caso de los adolescentes tiene un tope de 10 años, para los crímenes más graves que contempla nuestra legislación. Respecto de ambos adultos el tribunal también los condena por el delito de homicidio simple a la pena de cinco años y seis meses», mencionó.
Añadió que, «de esta manera, se ha dado algún grado de conformación a las víctimas de un hecho que ocurrió hace tanto tiempo pero que se logra esclarecer y logrando la fiscalía sostener sus tesis, obteniendo una condena respecto de todos los acusados por parte del Ministerio Público», finalizó.
Los tres acusados continuarán en prisión a partir de ahora en calidad de condenados hasta el cumplimiento de cada una de las sentencias impuestas.