El paso de Reinaldo Rueda al mando de la selección chilena ha sido más agraz que dulce. A pesar del cuarto puesto en la Copa América de Brasil, el equipo no luce como hace algunos años y las críticas no se han hecho esperar. Además, su trabajo se ha visto frenado por el estallido social acontecido hace un mes.
En la conferencia de prensa del miércoles pasado, el colombiano había mostrado su enojo por no poder conformar un plantel competitivo para el cuadrangular amistoso Sub 23 de Tenerife, España, donde enfrentaría a Brasil, Argentina y Estados Unidos.
Con estas dificultades, el entrenador confesó que pensó en dejar la selección, una decisión que aún considera, según informó La Tercera este domingo.
“Fue la tarde del viernes, específicamente, cuando Reinaldo Rueda estuvo muy cerca de sellar su renuncia. A las autoridades de Quilín no les avisó, pero sí a sus más cercanos en Pinto Durán. Se le veía muy triste, no entendía nada. Se siente solo, cuenta uno de sus colaboradores en el búnker nacional”, publicó el matutino.
Junto a esto, sumó un nuevo problema cuando pensó que las cosas se enfriaban. La decisión de los jugadores de suspender el compromiso amistoso contra Perú en Lima (19 de noviembre), el cual se sumó al cotejo frente a los bolivianos, que se iba a disputar el viernes 15 de noviembre en territorio nacional, también pegó duro.
El rotativo reveló que desde la ANFP confían en que se mantendrá en el cargo, pero que, a su vez, reconocen que no sería sorpresa que dejara su labor.
“A muchos en Pinto Durán les ha dicho que ya tiene decidido renunciar, revela un profesional que conoce bien el mundo interno del recinto de avenida Las Torres. Se cree traicionado, según cuenta otro funcionario de la Roja”, expresó el medio.
