Patricia Hidalgo (PPD) -despedida en noviembre- participó en la comisión de Desarrollo Social, donde contó detalles de cómo se habrían dado las conversaciones con la delegada presidencial RM para que votara a favor de la Declaración de Impacto Ambiental de un proyecto en Ñuñoa. Además reafirmó que el centro de acogida donde habría ocurrido una violación no estaba bajo su tutela, sino que del ministro Jackson.
Fue el 30 de noviembre pasado cuando el ministro de Desarrollo Social, Giorgio Jackson le solicitó a la entonces seremi metropolitana de Desarrollo Social, Patricia Hidalgo (PPD), su dimisión en el cargo.
Desde la cartera emitieron en ese entonces una declaración en la que aseguraron que la solicitud de renuncia se realizó luego de que Hidalgo omitiera denunciar un caso de presunta violación en un centro de atención a personas en situación de calle de en la Región Metropolitana, tras lo cual la exfuncionaria del gobierno acusó que las razones sobre su salida respondían a represalias en su contra por cuestiones políticas.
Este miércoles, tras ser invitada a participar en la comisión de Desarrollo Social de la Cámara, la exseremi Hidalgo realizó sus descargos en esta instancia parlamentaria, donde detalló las supuestas presiones de la delegada presidencial RM, Constanza Martínez, para que votara a favor la Declaración de Impacto Ambiental del proyecto para construir un Mall Vivo en la comuna de Ñuñoa.
“Sí, fueron presiones, presiones. Fue una reunión con la delegada Constanza Martínez. (…) Después de un gabinete regional que tuvimos en la comuna de Talagante, ella nos hace quedar. (…) Dice ‘quiero que salgan todos, solamente se quedan los seremis que votan en la comisión de Medio Ambiente. Y ese día nos hace quedarnos a todos para instruirnos la votación respecto del mall Vivo (de Ñuñoa). Sí, derechamente, (dijo) ‘vamos a votar ordenando los votos’, porque iba a ser muy feo -y ella lo dice así- que nos vean a todos aprobando, cuando algunos de nosotros fuimos contrarios a ese proyecto, que es conocido por todos”, sostuvo la exseremi.
Hidalgo indicó ante la comisión que, ante estas palabras, “yo le digo ‘bueno, si vamos a dividir los votos, y algunos de nosotros vamos a poder rechazar, porque en el fondo se va a aprobar igual con mayoría’, yo le digo ‘delegada, lo que usted nos está sugiriendo es algo súper impropio”.
Al respecto, destacó que “uno podrá conversar y compartir respecto de los argumentos que hay de fondo, si está a favor o no del SEA, si alguien conoce más la historia del proyecto en si lo puede hablar, pero no que alguien te diga ‘tienes que votar de determinada manera’, entonces cuando esto ocurre así yo le digo ‘lamentablemente le voy a informar que yo voy a rechazar’, y ella me dice que me va a llamar su jefe de gabinete, porque él va a decir quiénes podían rechazar, y yo le insistí y le dije ‘yo voy a rechazar’, y me dijo ‘soy tu superior político (…), yo soy tu jefa política en la región y por lo tanto yo doy la instrucción de cómo esto se hace’ y la verdad, para mí fue muy fuerte”.
Respecto del caso que involucra a la subsecretaria Francisca Perales, la militante PPD -quien asistió a la sesión acompañada de su abogado, Marcelo Castillo- acusó que esta le impidió excusarse de la votación de una planta de tratamiento de aguas servidas en Quilicura.
Tras una consulta realizada en la comisión de Desarrollo Social, la exseremi Hidalgo afirmó: “si se dio una orden para votar de determinada manera el proyecto de Quilicura, si se dio una orden, la orden de Interior, que es lo que me dice a mi la subsecretaria Perales por un llamado telefónico, así como luego por un WhatsApp, es que debe ser aprobado el proyecto de Quilicura”.
Al respecto, indicó que la subsecretaria Perales “primero me dijo que ‘son instrucciones de la ministra del Interior’, cuando hablamos por teléfono. Entonces inmediatamente le digo ‘perdón, ¿entonces usted me está diciendo que la ministra Carolina Tohá le dio a usted una orden?, y ella me dice ‘son órdenes del Ministerio del Interior, que es lo que después me escribe en el Whatsapp”.
Hidalgo indicó que por estos casos realizó una presentación ante la Contraloría, para que determine si se incurrió en una ilegalidad. “Yo tengo los WhatsApp para demostrar que la subsecretaria me dice que es Interior quien me da esas instrucciones”, reveló.
Las causas de su despido
La exseremi Hidalgo indicó en la comisión que fue convocada por el ministro de Desarrollo Social, Giorgio Jackson, para el dia 30 de noviembre, a través de un mensaje de WhatsApp, sin tener conocimiento sobre la razón de su citación. En esa reunión, afirma que el secretario de Estado le entrega una carta donde se le pide en las próximas 48 horas presentar la renuncia al cargo, y que este le explica que los motivos formales son por “pérdida de confianza”.
“Le pregunto yo (al ministro Jackson) si esa es la causa formal, que me explique cuál es la causa informal (…) y el inmediatamente me dice que es a propósito de una evaluación que hacen de mí la subsecretaria Perales y la delegada regional Constanza Martínez, que no están de acuerdo en la forma como yo he acatado el don de mando, la verticalidad de las instrucciones que a mí se me entregaban y que habían descoordinaciones con ellas y que, por tanto, él ya lo había conversado con la ministra del Interior, Carolina Tohá, y que estaba resuelta mi salida, ya que ‘no fluía’”.
“Le digo, ‘mire ministro, yo le voy a decir la verdad, el problema que he tenido con ambas jefaturas es a propósito de las votaciones del SEA (Servicio de Evaluación Ambiental), que reconozco que ellas se han molestado conmigo”, agregó la exseremi.
Es en ese entonces cuando -afirma- el ministro Jackson le habla además de “‘una supuesta vulneración -me dice-, pero eso es algo menor, porque no lo tengo muy claro’, y yo le digo ‘eso es grave lo que usted me está diciendo’. Si yo soy acusada de un delito, porque hoy no denunciar una violación, una vulneración de un niño o de una niña, a propósito de la promulgación de la Ley 21.430 ya es distinto, o sea existe una doble inexcusabilidad, ‘de lo que usted me está acusado en grave, gravísimo’ y ahí el como que recula también un poco y me dice ‘es algo que se está investigando’ y le pregunta a su abogado y le dice ‘no, aún no hay nada claro”.
Hidalgo indicó que pensó que ahí había terminado el episodio, pero que comenzó a recibir mensajes, incluso de su propio partido, preguntándole por qué no había realizado la denuncia.
“La verdad es que en ese momento yo tenía que hacer algo, callada no me podía ir. Tu no te puedes ir callado cuando fuiste injustamente acusado”, afirmó.
En este sentido, indicó que hubo una falla en los protocolos en el caso de la menor cuyos derechos fueron vulnerados, y sostuvo que el albergue donde supuestamente ocurrió el hecho no era uno de los que tenía bajo su cargo.
“Cuando muere un niño en la región, cuando es violado, cuando es vulnerado en sus derechos, en cualquiera de los hogares que pudiéramos tener (…), uno puede conocerlo, pero los que actúan automáticamente ahí son los protocolos, porque a esta Seremi lo que le corresponde es hacer convenios con ejecutores, que a veces son los municipios y a veces son privados, que son los que están a cargo de estas casas, no es la Seremi ni es el Ministerio el que está en las residencias, sino que son ejecutores, y ellos deben seguir el conducto regular que es el que está establecido en las bases de licitación, en los términos de referencia del programa que allí se está llevando a cabo”, agregó.
Es ahí donde la exseremi Hidalgo afirma que la casa donde “supuestamente” ocurrió la vulneración, está a cargo del propio ministro Jackson.
“Me dice que la vulneración ocurrió en un hostal, entonces dije ‘ah, él está confundido’, y ahí le dije ‘ministro, le tengo que explicar que el hostal no es mío, el hostal es suyo, y eso ocurrió hace muchos días atrás’. La conversación con el ministro Jackson ocurrió el 30 de noviembre, la supuesta vulneración debe haber pasado ahí por el 12 de noviembre, yo me entero de esta por ahí por el 17 de noviembre, y el me dice ‘sí, debe ser de lo mismo, porque yo también me enteré mucho después’”.
“Me dijo ‘el tema es que al parecer no estaban puestas las denuncias’. Le dije, ‘no ministro, si es el mismo caso que yo estoy pensando, de una menor extranjera, la denuncia fue hecha por la Vicaría de la Pastoral Social que es el ejecutor de esa casa, pero esa casa es suya”, le insistió.
Agrega que el ministro Jackson le indicó que la casa en cuestión se encuentra en la Región Metropolitana. “Yo le dije sí, es que todas las casas están en la Región Metropolitana, pero hay algunas que son de dependencia mía, otras son de dependencia suya, otras son de dependencia de la Subsecretaría y algunas son de dependencia de los servicios”.
Más aún, la exseremi indicó que aún no tiene claro -ya que nadie le informó- si el caso por el que se le acusa es el mismo que discuteron con el ministro y que, hasta el día de hoy, no es posible comprobar incluso si existió esta vulneración por la falta de protocolos que existiría, a su parecer, en el hogar en cuestión.
“A lo mejor el ministro (Jackson) de lo que me está acusando es otro caso, otra persona, porque yo estoy asumiendo que es este (…) Creo que la mejor persona que les puede de qué niña se trata, la identifcacion, edad, dónde fue y dónde esta hoy (la menor), es el propio ministro”.
“Cuando digo que no está, es porque desapareció, o sea llegó la funcionaria de la PDI a intentar hacer la investigación y no había menor”. “No sabemos ni siquiera si estuvo en uno de los dispositivos del Estado”, destacó.