Una nueva reunión de trabajo de la mesa público – privada para el control de la mosca de alas manchadas, o Drosophila suzukii, sesionó en dependencias del SAG en la región del Maule, con la finalidad de conocer las últimas actividades realizadas en torno al control de este insecto.
En esta instancia participan representantes del sector privado, de la academia, empresas, instituciones públicas, entre otros, aunando criterios y coordinando acciones para el control de esta mosca detectada este año en la región.
Durante la jornada se dio a conocer, por parte del SAG, la situación actual de la plaga en la región, las actividades de difusión que se han realizado a la fecha, tanto a agricultores como a personal técnico de distintas empresas y asociaciones, y las acciones de control establecidas. En este sentido, en la región ya más de 2.400 agricultores han recibido la información técnica del SAG respecto de esta nueva plaga y recomendaciones culturales para su control. Asimismo se dio a conocer que el Maule cuenta con 8 áreas reglamentadas producto de la detección de Drosophila suzukii, las cuales se encuentran en las comunas Cauquenes, Colbún, Linares, Longaví, Parral, Retiro, Maule, Río Claro, Yerbas Buenas y Sagrada Familia.
Respecto a esto, la directora regional (s) del SAG, Ana Cabrera, señaló que “el servicio, en la región del Maule, ha tomado con responsabilidad la detección de esta plaga, lo cual se ha traducido en que hemos densificado el número de trampas, las cuales llegan a 500; junto con ello hemos contratado a un equipo técnico para que realice las inspecciones y fiscalizaciones y, por supuesto, una vez que se detectó la presencia de la plaga en la región, el Servicio emitió una Resolución de Emergencia, en donde se definen una serie de actividades que el Servicio va a ejecutar, lo cual también significa que los agricultores van a tener que participar en forma conjunta”.
Por su parte, la seremi de Agricultura, Carolina Torres, quien preside esta instancia regional, solicitó la colaboración del sector con las acciones de control cultural establecidas por el SAG, a fin de evitar daños económicos en la región: “lo más importante es que el agricultor se informe; hemos llegado a los pequeños agricultores a través de las charlas de difusión que se han realizado, por tanto es importante que se tomen las precauciones necesarias. Hay que anticiparse; tenemos que lograr el mayor control posible, ya que de esta manera será menor el daño que esta plaga provoque”.
Durante la reunión, Gastón Ulloa, representante de BioFuturo, laboratorio autorizado por el SAG para la determinación de ejemplares adultos de la mosca de alas manchadas, realizó una importante presentación acerca de algunos aspectos técnicos relacionados con la Drosophila suzukii y dio a conocer que en el Maule existen trampas instaladas, contratadas por productores particulares, los cuales reportan al SAG la detección de ejemplares positivos.
Asimismo, Carmen Gloria Morales de INIA dio a conocer el “Programa de Extensión, Capacitación, Investigación e Innovación en Berries para la Región del Maule”, programa focalizado principalmente en productores de frambuesa y arándanos, y que cuenta con financiamiento FIA – FNDR.
Respecto a la implementación de controladores biológicos para esta plaga, Luis Devoto de INIA Quilamapu, entrego información relevante relacionada a los estudios e investigación que se está desarrollando en torno a este tema, información que se irá actualizando en las próximas reuniones de la mesa.
Dentro de los compromisos adquiridos por esta instancia quedó establecido que el SAG continuará con la revisión de trampas en forma exhaustiva, con la realización de charlas de difusión y fiscalizando la aplicación de las medidas establecidas en la Res. 617/2018 para el control de esta plaga. Asimismo, el Servicio dejó extendida la invitación a las distintas organizaciones de agricultores de la región para que soliciten información o charlas técnicas, con el fin de conocer aspectos de la plaga y su control.