Pese a que madre e hijo vivían en Talca, estuvieron separados durante 30 años, sin ningún tipo de comunicación. Sin embargo, esa angustia terminó, gracias a las gestiones realizadas por la Oficina de Integración Comunitaria de la Cuarta Comisaría “Cancha Rayada” de Talca, que en tan sólo dos días volvió a reunir a esta familia.
Es la historia de César Rebolledo Mora, de 49 años de edad, quien por razones labores se trasladó hace tres décadas de la ciudad de Concepción a la de Curicó, perdiendo contacto con su madre, la señora Francisca Mora López, de 79 años de edad.
Años más tarde, la mujer se radicó en Talca sin saber que su hijo se encontraba en la misma comuna. Distanciamiento que culminó con un emotivo reencuentro que tuvo lugar en dependencias de la Cuarta Comisaría de Talca.
En la ocasión madre e hijo agradecieron el trabajo desarrollado por Carabineros, que les ha permitido volver a reencontrarse y comenzar una nueva etapa en sus vidas.