Uno de los datos más relevantes que entregó el último Censo, es que las mujeres chilenas no tienen entre sus planes inmediatos ser madres y de serlo, el promedio de hijos en edad fértil es de 1.3, realidad que condice con la vivida en los años sesenta, donde era de cinco hijos por mujer.
En el Hospital de San Javier la unidad ginecobstetra, también se han adaptado a este cambio y han centrado su foco en entregar una atención integral para la madre y el recién nacido y, en aumentar las prestaciones en enfermedades que antes no eran atendidas por su nivel de complejidad, lo que en términos prácticos ha significado mayor número de atenciones y una lista de espera reducida.
Pero este cambio ha sido paulatino, en plena década de los 90 el Hospital solo contaba con un ginecólogo, que era el encargado de realizar todo el proceso.
“El hospital no tenía anestesiólogos (…) carecía de pediatras. La construcción era de más de 100 años y el pabellón quedaba en medio del patio, era más romántico que funcional”, recuerda Andrés del Río, actual médico jefe de la Unidad de Ginecología y profesional de este hospital por 24 años.
Hoy en día este centro hospitalario ha vivido hitos trascendentales, como es de pasar de hospital de baja a mediana complejidad. El área de ginecología cuenta con cinco médicos. El número de cirugías ha aumentado; han perfeccionado las técnicas para prolapsos más complejos, tumores benignos o histerectomía. Han incluido atención en patologías en mamas y ampliado el tipo de atención en embarazadas. Pero también tienen desafíos como es trabajar en el manejo de los pre cáncer del cuello del útero y el manejo inicial de la fertilidad.
TECNOLOGÍA
Ligadura de trompas, histerectomía radical benigna, tumores benignos de ovario y útero, tratamiento quirúrgico por incontinencia urinaria de esfuerzo y prolapsos, son las patologías con mayor demanda que atiende el Hospital de San Javier.
“Estas prestaciones no solo han resueltos los problemas de la población, sino que también han reducido la lista de espera. Y eso va directamente en beneficio de las señoras que están esperando operarse”, explica el ginecólogo Enzo Viera.
En relación a las técnicas empleadas, Viera asegura que “no tenemos ninguna diferencia tecnológica con otros centros, estamos haciendo cirugías mínimamente invasivas, las señoras se operan en la mañana y en la tarde ya están en la casa.
NUEVAS PRESTACIONES
En este afán por mejorar la atención, se ha sumado la experiencia de los ginecólogos Gabriela López y Juan Sepúlveda; además de la cooperación de la doctora del hospital Carlos Van Buren de Valparaíso, Paulina Sáenz, quien además es villalegrina y cercana al centro asistencial de San Javier.
“Paulina nos ayudó a implementar la técnica conocida como la fijación del prolapso al ligamento sacroespinoso abierto. Hay dos formas de hacerlo y la doctora nos ayudó a implementar un sistema mucho más seguro y rentable”, comenta el doctor Viera.
Otra buena noticia dentro del equipo, es el trabajo que está realizando la doctora Paula Celis, quien pertenece al grupo de patologías de mamas del Servicio de Ginecología en Talca y en el Hospital de San Javier ha enfocado su trabajo en la realización de ecografías y operaciones de patologías benignas de mamas.
EMBARAZO INTEGRAL
En los primeros seis meses del año, este establecimiento tuvo 120 partos, cifras considerablemente inferiores a décadas pasadas, pero que condice con la realidad de los últimos años. Sin embargo, este escenario ha permitido que la atención a la mujer durante el proceso de gestación, sea mucho más completo.
“Han aumentado el número de acciones con las embarazadas. Tenemos cinco ecógrafos bastante avanzados, con la posibilidad de realizar anatomía fetal; de realizar estudio de doopler, arterias del feto y de la madre y con ello lograr un mayor diagnóstico. Estamos haciendo cirugías a un buen nivel. Incluso en varios periodos hemos servido de apoyo a la red regional”, explica el doctor Andrés del Río.
CÁNCER Y FERTILIDAD
Actualmente la unidad de ginecología tiene dos grandes desafíos establecidos. Uno está ligado con la etapa inicial del manejo de los pre cáncer del cuello del útero, y “cuya atención consistiría en empezar a hacer colposcopia y la conización del cuello. Además, ayudaría a acortar los tiempos de espera”, explica del Río.
El otro reto se relaciona con el manejo inicial de la fertilidad, área que en la región del Maule está en incipiente desarrollo y según explica el profesional el Hospital de San Javier podría trabajar el manejo inicial de la fertilidad.
“Podríamos perfectamente realizar las primeras etapas, con tratamientos de baja complejidad en fertilidad. Es un tema muy carente en la región, tenemos solo un especialista en Talca y acá podríamos hacer varios exámenes, con la idea de llevar el paciente adelantado a la etapa en fertilizaciones asistidas”, precisa el doctor.
Con desafíos y proyecciones claras, la unidad ginecobstetra es un eslabón esencial en el desarrollo del Hospital de San Javier y así lo siente este equipo.
“Estamos en la etapa donde podemos decir nosotros podemos, somos parte de una red y podemos asistir a los hospitales grandes y esto va en beneficio de las pacientes y de la población”, finaliza el doctor Viera.
Por su parte el doctor del Río destaca que “el crecimiento en los últimos 24 años ha sido impresionante”, además “este hospital aún permite conocerse entre funcionarios, tener una relación casi de amistad y eso hace grato el venir a trabajar acá”, puntualiza el facultativo.