El operativo fue encabezado por el gobernador Armando Leppe, como un esfuerzo de la Mesa para la Erradicación del Trabajo Infantil.
Una fiscalización masiva a centros nocturnos de Talca, sorprendió a cuatro trabajadoras inmigrantes, sin documentos de residencia legal. Se trata de jóvenes provenientes de Colombia, Perú, República Dominicana y Argentina. Dos empleadores también serán denunciados ante las autoridades administrativas, como infractores a la Ley de Extranjería.
“Realizan trabajos en estos locales nocturnos, pero en calidad de turistas, y por lo tanto no pueden desarrollar actividades remuneradas”, dijo el jefe del Departamento de Extranjería y Policía Internacional, Comisario Gustavo Espinoza.
Ademas de dicha repartición, el operativo contó con la participación de la Dirección del Trabajo, Seremi de Salud, Sename y la Brigada de Delitos Sexuales. El gobernador de Talca, Armando Leppe, encabezó la acción.
“Las personas que están aquí de manera irregular, tendrán que acercarse a la Gobernación o Intendencia, para dar curso normal a su documentación y trabajar como lo hace todo el mundo en nuestro país”, señaló el gobernador.
La fiscalización incluyó siete cabarets en distintos puntos de Talca.
“Esta iniciativa es una recomendación de la Mesa contra el Trabajo Infantil, que lidera nuestra seremía. Si bien cada servicio fiscalizó su ámbito de acción, nuestro interés aquí era asegurarnos que ningún menor de edad estuviera en estos lugares”, afirmó la seremi del Trabajo y Previsión Social, Elia Piedras.
Piedras precisó que los fiscalizadores encontraron otras irregularidades, como la ausencia de registros de asistencia y contratos de trabajo para las jóvenes que laboran en estos locales. “Se le ha dado un plazo de 5 días a los empleadores para que asistan a la Inspección del Trabajo y exhiban los contratos”. Los dueños de los negocios que no muestren la documentación al día, se exponen a sanciones monetarias que parten en las 5UTM.
La directora regional del Sename, Ana Cecilia Retamal, calificó el operativo como “exitoso”. “Afortunadamente no hemos detectado presencia de niños, niñas o adolescentes ejerciendo el comercio sexual y tampoco en manos de explotación comercial infantil”, sostuvo.
La explotación sexual forma parte de las peores formas de Trabajo Infantil, junto al trabajo forzoso, el reclutamiento u oferta de niños para la realización de actividades ilícitas.
El seremi de Salud (s), Rafael Santander, indicó que su servicio revisó las condiciones de salud y seguridad de los cabarets, durante la fiscalización. “Hemos hecho dos sumarios producto de vías escape no bien señalizadas, en lugares que además carecen de extintores y no tienen las condiciones mínimas para que las personas puedan ponerse a salvo en caso de emergencia”, manifestó.