El exministro de Educación Marco Antonio Ávila dijo estar disponible para presidir su partido político, Revolución Democrática (RD), luego que la noche del miércoles se confirmara la salida del senador Juan Ignacio Latorre de aquel cargo.
En conversación con La Segunda, Ávila dijo que no estaba entre sus planes liderar el partido del Frente Amplio, pero tras su salida del gobierno, espera poder hacerlo.
“Absolutamente, aunque nunca lo tuve contemplado, porque no tenía intenciones de salir del ministerio. Me interesa volver a situar al partido en la responsabilidad que le corresponde. Hay una combinación de militantes con los que podemos armar una lista, que reúna a quienes hemos estado en el gobierno, en la sociedad civil y en el mundo municipal”, dijo Ávila.
“Es el momento de hacer que las distintas tendencias se encuentren (…) perfectamente podríamos armar una lista única”, dijo sobre el partido.
Tras su salida del gobierno, Ávila aseguró que tendría tiempo “para dedicarme a apoyar y reconstruir mi partido”, que se vio fuertemente golpeado por el caso Democracia Viva, el primer caso de convenios irregulares con las fundaciones que dio paso a que se conocieran otros polémicos contratos.
“Hasta el minuto, ningún militante se ha quedado con 100 pesos, porque ni siquiera sabemos todavía los alcances de Democracia Viva, sin perjuicio de que lo condenamos profundamente y hemos dicho que eso no es la manera de gestionar los recursos del Estado”, dijo Ávila sobre el caso.
Renuncia de Latorre a RD
El senador Juan Ignacio Latorre, y toda la mesa directiva del partido, renunciaron la noche del miércoles, luego de que el partido perdiera presencia en el último cambio de gabinete realizado por el Presidente, Gabriel Boric.
De tener dos ministros, en Educación y Desarrollo Social, RD pasó a solo tener un ministerio y es el de Bienes Nacionales con Marcela Sandoval.
Sin bien Ávila no cree que esto haya sido un castigo para su partido, sí planteó que hubo errores por parte de la administración de Latorre.
“RD ha tenido que enfrentar una serie de dificultades muy complejas, y el tratamiento político y comunicacional del caso desde el mismo partido no ha sido el adecuado, porque la idea, más aún con la salida de Giorgio Jackson, de ser responsables de algo, como si todos los militantes de RD estuviésemos involucrados en casos de corrupción, y eso no ha sido así”, opinó el exministro Ávila.
“Hubo falta de diseño político para decir cómo comunicamos esto, los pilló por sorpresa, además está involucrada una diputada y hubo un tratamiento contradictorio ahí. Una segunda tarea es hacerse cargo de la gestión directa de RD con el gobierno cómo se vincula con el Presidente y con el resto de la coalición, la importancia de tener una comunicación fluida y firme”, añadió.
Las elecciones en el partido serán en octubre próximo y aún no hay candidatos oficiales para presidir Revolución Democrática.