Alrededor de la 1:30 hora de hoy llegaron a Cañete, su ciudad natal, los restos del cabo de Carabineros Óscar Galindo Saravia para su sepultación. Su féretro fue recibido en su casa bajo lluvia y en medio de profunda tristeza y dolor por parte de familiares, amigos y carabineros de la comuna.
El cortejo fúnebre del funcionario asesinado el miércoles en la comuna de La Pintana de la capital recibió homenajes a medida que pasaba por las ciudades ubicadas en la Ruta 5 Sur, especialmente en la Región del Biobío.
Después de recibir honores en Chillán, la caravana con sus restos llegó a Concepción alrededor de las 22 horas de anoche, donde fue saludado con sirenas, y luego continuó por Coronel y Lota, ciudades en que los habitantes también entregaron sus saludos al cortejo.
Finalmente, alrededor de las 1:30 de la madrugada, la comitiva llegó a su casa en Cañete donde será velado y posteriormente se efectuarán sus funerales.
El fallecido uniformado tenía 29 años de edad y 11 de servicio, y dejó una familia compuesta por su esposa, la cabo primero de Carabineros Priscilla Lavanderos Hernández, y dos hijos. También tenía un hijo de otra relación.
Óscar Eduardo Galindo Saravia ejercía en la 41ª comisaría de La Pintana. Se trataba del único carabinero de su familia. Finalmente, a las 16:00 horas se realizará su funeral en el Cementerio General de Cañete.