A nueve meses de uno de los incendios forestales más feroces de nuestra historia reciente -que dejaron como saldo 650 mil hectáreas devastadas y más de 1.500 viviendas destruidas-, Desafío Levantemos Chile y Coca-Cola Chile anunciaron un plan de reconstrucción integral para la localidad de Santa Olga, que considera un programa de reforestación, la construcción de dos canchas de fútbol en los sectores de Empedrado y El Progreso-Papalillo, capacitación para emprendedores y la entrega de containers especialmente habilitados como kioskos.
El plan fue anunciado en un acto que contó con la presencia de autoridades de la Región del Maule, líderes sociales de Santa Olga, comunidad, ejecutivos de Coca-Cola Chile, Coca-Cola Embonor y Desafío Levantemos Chile.
En la oportunidad, se hizo entrega de 20 kioskos a almaceneros de la localidad, además de material publicitario y kits de reactivación, consistentes en equipamiento y una primera carga completa de productos sin costo para ellos.
Además, se realizó un positivo balance del programa de capacitación “Levantando mi Negocio”, que lideró Desafío Levantemos Chile, y contó con la participación de 113 beneficiarios, de las cuales 111 fueron mujeres. El curso contempló 5 módulos de 12 horas cada uno, durante 5 semanas, e incluyó clases de planificación estratégica, apoyo psicológico-motivacional, marketing sostenible, diseño y producción, finanzas y contabilidad.
“Estamos muy contentos, ya que damos cumplimiento al compromiso de apoyo que hicimos durante la emergencia, que no sólo consideró importantes donaciones, sino que también el desarrollo de proyectos de reconstrucción, que ayudaran a la comunidad de Santa Olga a volver lo antes posible a la normalidad. Con este plan, que entre otras cosas considera un gran impulso a los comerciantes locales, creemos que estamos dando un paso importante en el renacimiento de la localidad que se ha convertido en símbolo de esta tragedia”, señaló Patricio Cabrera, gerente de Planta Talca de Coca-Cola Embonor.
VALORACION
Sandra Núñez, a pesar de la adversidad, es un fiel reflejo de la fuerza de los habitantes de Santa Olga. Aunque aún vive en una casa de emergencia, ya volvió a abrir su kiosko en un container especialmente habilitado entregado por Coca-Cola.
“Estoy agradecida porque es lo que me gusta y lo que mejor sé hacer. Además, tengo la cabeza ocupada y no me deprimo. Ahora sueño con seguir creciendo con mi negocio”, señaló.
Asimismo, Nicolás Birrell, director ejecutivo de Fundación Desafío Levantemos Chile, destacó el trabajo desarrollado junto a Coca-Cola en Santa Olga.
“Como Desafío, hoy estamos entregando una ayuda a las comunidades para que ellos mismos se puedan parar. Y esta ayuda consiste en capacitarlos en los oficios que hacen, darles las herramientas de trabajo y acompañarlos en una primera etapa. En este contexto, hicimos una alianza colaborativa con Coca-Cola para brindar una ayuda muy concreta y específica para impulsar el emprendimiento, que creemos que tiene un valor trascendente en la recuperación integral de Santa Olga”, indicó.
Por su parte, el alcalde de Constitución, Carlos Valenzuela, celebró la iniciativa y el trabajo realizado.
“No puedo describir la alegría que me da ver a los niños jugar en las canchas del Progreso Papalillo y Empedrado en donde se generó una oportunidad luego de una tragedia. En cuanto a los cursos de capacitación y la entrega de kioskos es una oportunidad y una motivación para todas aquellas personas que perdieron su fuente laboral y que hoy pueden trabajar y tener una justificación para levantarse todos los días. Como alcalde estoy muy agradecido de Desafío Levantemos Chile y Coca-Cola por todo lo que han hecho por nuestros vecinos”, destacó el jefe comunal.
Además de la capacitación en reemprendimiento, un grupo de habitantes de Santa Olga y sus alrededores han sido instruidos en técnicas de arborización y reforestación, con la meta de plantar 200 mil especies nativas en 5 temporadas.
Junto con lo anterior, se entregaron todas las herramientas para la construcción y mantención de los invernaderos y sombreaderos a la comunidad, la que estará ciento por ciento encargada de su cuidado y desarrollo.