La Corte Suprema ha decidido anular la expulsión de cuatro estudiantes del Colegio Saint George’s de Vitacura, quienes fueron acusados de difundir imágenes de sus compañeras con rostros superpuestos a cuerpos desnudos, creadas mediante inteligencia artificial. La resolución del máximo tribunal revirtió la sanción impuesta por la Corte de Apelaciones de Santiago, que había determinado la medida más severa para los involucrados.
En su fallo, la Corte Suprema estableció que la decisión del colegio de aplicar solo una sanción condicional no era ilegal ni arbitraria, y subrayó que las instituciones educativas privadas tienen autonomía para definir sus propias normas y sanciones conforme a su reglamento interno. “La elección de una de las sanciones disciplinarias posibles dentro del catálogo de las definidas en el reglamento interno de un establecimiento educacional privado se inserta en su proyecto formativo”, sostuvo el tribunal.
Asimismo, el fallo destacó que el colegio implementó medidas con un enfoque pedagógico, correctivo y psicosocial, en línea con su misión educativa. En ese sentido, el tribunal indicó que “en tales condiciones no se aprecia –en la actuación que se reprocha– transgresión a la legalidad, en tanto la decisión se incluye dentro de la autonomía que se reconoce a los colegios privados”. Con esto, se reafirma el derecho de los establecimientos educativos a tomar decisiones disciplinarias dentro de su marco normativo.