Este lunes, se confirmó la parrilla programática para el Festival del Huaso de Olmué, teniendo entre sus abanderados el humorista Bomo Fica, quien volverá al Anfiteatro El Patagual tras su show en 2017.
Es por eso que en conversación con BioBioChile el humorista compartió algunos adelantos de su próxima presentación, asegurando que espera que “esta sea la rutina más importante y la mejor que he hecho en mi vida”.
“Me preparé para esto y trabajé para esto. El festival ha querido dignificar mi trabajo, y espero estar a la altura del cariño y el afecto de TVN, Olmué y las personas que vean el festival”, sostuvo a este medio.
Asimismo, aseguró que antes los múltiples cambios en el humor, actualmente “se puede hablar de todo, lo importante es cómo lo hablamos, cómo lo decimos. Tiene que ver con el tratamiento, pero sigue siendo igual”.
Sobre sus críticos, apunta que “el humor siempre va a estar en un estado de conflicto, donde siempre habrá alguien que no le guste una palabra o algo que lo diga. Eso da a una caja de resonancia en todas las redes sociales”.
“Si yo viviera preocupado de eso, me iría mejor a Marte, en una de las naves que están viajando para allá”, añadió en tono cómico.También añadió que “he logrado sobrevivir 36 años en este oficio, yo creo que tiene que ver en parte con la evolución” del promio humor.
Bombo Fica y su llegada polémica tras Viña 2023A mediados de noviembre, Bombo Fica protagonizó las portadas de diferentes medios donde aseguraban que, tras no lograr acuerdo con el Festival de Viña del Mar, el humorista habría negociado para participar en el Festival del Huaso de Olmué con una cifra alrededor de los 100 millones de pesos.
Así, el propio humorista salió a negar dichas cifras, apuntando incluso que todo se trataba de mentiras. “No me molestó (las noticias sobre su unión al festival), porque uno tiene que tomarlo con la madurez de lo que significa el cahuineo chileno, que tiene que ver con querer saber y meterse”, dijo.
Sobre sus negocios con el Festival de Viña, el comediante apuntó además que “consideré que mi trabajo estaba siendo mirado con bastante desprecio, considerando que uno es un artista que algo ha hecho en estos años”.
“Uno no pide más. Uno pide respeto, dignidad. O sea, tratar con el respeto que se merece”, criticó.Por otro lado, ve con buenos ojos la cruzada en Olmué, sosteniendo que este festival sí respeta a sus cartas.
“Hoy tenemos una parrilla de un nivel maravilloso, que te muestra que podemos hacer cosas importantes con un presupuesto que tiene que ver con el equilibro, con la proporcionalidad de otros artistas”, explicó.
Asimismo, dio pistas de cuánto le pagarán en el evento con un toque de humor, asegurando que será “lo mismo del 2017, y ni siquiera arreglé el IPC”.