Sin importar la lluvia ni el frío, más de cuatro mil maulinos fueron parte de la gira del Ballet Folklórico Nacional, Bafona, por seis comunas de la región, repletando gimnasios y aplaudiendo cada uno de los cuadros presentados por el elenco estable del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio.
La ciudadanía de Rauco, Hualañé. Cumpeo (Río Claro), Pencahue, Longaví y Cauquenes disfrutó del homenaje a la linarense Margot Loyola Palacios, obra estrenada en noviembre de 2018 en la Quinta Vergara y que muestra un resumen de su vida artística, con una mezcla de música y danza. Posteriormente, presenciaron la puesta en escena de “Aymara Marka” y vibraron y bailaron con el tradicional “Huasos”.
“Estoy muy feliz por el resultado de esta gira. Una vez más Bafona conmovió a la ciudadanía y llenó cada espacio de presentación, lo que demuestra el gran cariño que las comunidades sienten por ellos. Con una amplia trayectoria promueven nuestras expresiones culturales, todo con gran profesionalismo y con una mirada siempre puesta en las personas”, manifestó la seremi de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Pía Soler.
El elenco busca contribuir al acceso democrático y equitativo de la población a expresiones artísticas de excelencia. Integrado por profesionales de la danza, música y artes escénicas, difunde las manifestaciones de la cultura tradicional y popular de Chile.
«Es muy motivante para nosotros como Ballet Folklórico Nacional contar con el apoyo del público. Estamos infinitamente agradecidos de la excelente recepción que nos brindaron durante la gira por la Región del Maule. Sin importar el frío o la lluvia, siempre contamos con el aplauso cálido, el cariño y admiración de cientos de personas que repletaron cada uno de los recintos donde nos presentamos», señaló Jaime Hernández, director artístico del elenco.
Con una trayectoria de más de 50 años, ha promovido el rescate y la conservación del patrimonio cultural, manteniendo vivas sus leyendas, ceremonias, tradiciones y costumbres. Sus obras coreográficas se sustentan en estudios antropológicos y artísticos que permiten el conocimiento del hombre y la mujer de Chile, el que después es plasmado y proyectado sobre el escenario.
