Desde su ejercicio profesional y su contribución humana, las académicas de la Universidad de Talca (UTalca), Karin Saavedra y Soledad Schott, se han convertido en agentes de cambio en la lucha por la igualdad y equidad de género. Por ello fueron reconocidas por autoridades regionales en el Encuentro cultural de las mujeres en la Región del Maule, en coincidencia con el “Día Internacional de la Mujer”.
La actividad se desarrolló entre la sede de la Intendencia y el Teatro Regional del Maule, donde se celebraron conversatorios y premiaciones a más de 40 mujeres académicas, profesionales, emprendedoras, funcionarias policiales, bomberas, dueñas de casa y religiosas que con su labor significan un valioso aporte para la región.
El intendente, Pablo Milad, presidió las actividades conmemorativas y resaltó que “este día nos llama a la reflexión porque tenemos que eliminar la cultura del machismo en nuestro país”.
RECONOCIDAS
Karin Saavedra es académica de la Facultad de Ingeniería y es la primera Ingeniera Aeroespacial de Chile. También cuenta con un doctorado en Ingeniería Mecánica. Su labor ha estado orientada a promover la inclusión de la mujer en la ciencia y tecnología. Además es una de las finalistas del Premio InspiraTEC – 2017, uno de los principales reconocimientos que se entrega a mujeres que aportan a la industria tecnológica nacional.
La ingeniera, quien también es directora del Magíster en Ciencias de la Ingeniería con mención en Ingeniería Mecánica, fue invitada a dar el discurso de bienvenida. Durante su alocución abordó las brechas laborales, académicas, económicas y sociales que sufre la mujer en la actualidad.
“Es un día para reconocer a todas esas mujeres que han enfrentado las desigualdades que históricamente hemos vivido. Estoy convencida que tenemos un espacio y podemos aportar para la excelencia de las soluciones. Debemos tomar acciones para motivar el ingreso de la mujer en el área de la tecnología”, expresó Saavedra.
Soledad Schott es académica de la Facultad de Psicología y es directora del Centro de Psicología Aplicada (CEPA) de la Universidad. Junto a su equipo ha especializado su labor en atender a la comunidad por trauma psicológico, riesgos psicosociales, prevención y denuncia de la violencia contra la mujer.
“Para mí es un orgullo porque tiene que ver con el ámbito de mi labor, por la toma decisiones y aporte al desarrollo de la política pública regional. Me siento muy contenta porque si bien es un reconocimiento personal, detrás hay un equipo de trabajo conformado por muchas mujeres también”.
El CEPA fue creado en el 2005. Esta unidad clínica y de investigación lidera la gestión psicológica en el Maule. Entre sus labores más importantes destacan la atención a las víctimas del terremoto del 27F y de los incendios forestales de 2017. Recientemente ejecutaron una importante labor en apoyo a los trabajadores afectados por los despidos a causa del cierre de empresas en Linares y Cauquenes.