En el Tribunal Constitucional (TC) recaerá definir si atenta o no contra la Carta Fundamental la despachada ley que permite a las mujeres abortar voluntariamente, en caso de cumplir con alguna de las tres causales que estipula el articulado.
Esto, luego que la Sala de la Cámara de Diputados aprobó por 70 votos a favor y 45 en contra el informe de la comisión mixta que abordaba ciertos aspectos, en los que no hubo acuerdo para que avanzara la iniciativa que autoriza a las mujeres interrumpir su embarazo en los primeros meses de gestación, en caso de peligro de vida de la madre, que el bebé en gestación no tenga expectativa de vida al nacer y de violación.
Con esta votación, el texto quedó en condiciones de ser promulgado por la Presidenta Michelle Bachelet, aunque deberá superar un escollo más que ha criticado insistentemente el oficialismo y varios legisladores independientes, que es el requerimiento interpuesto por senadores de Chile Vamos ante el organismo revisor de que las normativas que se despachan, no vayan en contra de los derechos que garantiza la Constitución, como el derecho a la vida consagrado allí.
Finalizado el trámite en el hemiciclo, el diputado socialista Juan Luis Castro expresó que ya despachada la ley “nos preparamos para la gran batalla en el Tribunal Constitucional, porque ahí, pese a que es un órgano distinto al Congreso, se tendrán que ver las impugnaciones que la derecha no acepta como soberanía del Congreso y que quieren derribar algunas de las causales que están en juego”.
El legislador explicó que la traba pendiente era que en caso de violación a la menor de parte de su padre, se pueda facultar al juez para que éste determinara el aborto, lo que ya fue resuelto en el debate de la comisión que dio paso al informe aprobado.
“Espero que el Tribunal Constitucional de una vez por todas conozca la soberanía del Congreso, no dé lugar a las impugnaciones que fueron derrotadas en ambas cámaras, le restituya el derecho que la democracia le está dando a las mujeres a que nunca más una interrupción del embarazo la penalice y finalmente la coloque en una situación de humillación. Pido que haya conciencia de que no se vulnere ni doble la mano a la voluntad de Chile”.