Ya han pasado varias horas desde que el tío abuelo de Tomás Bravo, Jorge Escobar, quedó en libertad, tras la audiencia en la Corte de Apelaciones de Concepción, atendido a falta de antecedentes y siendo imposible situar al imputado en el tiempo y lugar en que acaecieron los hechos con la desaparición y muerte del menor.
El dictamen fue abordado por su abogado, Cristián Sleman, quien apuntó directamente al Ministerio Público y, en particular, al fiscal a cargo, José Ortiz, argumentando que «esta causa es un ejemplo de vulnerar el principio de inocencia».
Además, admitió que «ha existido falta de rigurosidad científica en todos los informes que se han presentando, incluso en este nuevo peritaje que había anunciado el Ministerio Público que había prometido cambiar el rumbo del caso».
Siguiendo con su mirada sobre las falencias en la investigación, el jurista se refirió a un examen bucal a la víctima.
«Con esta prueba se llegan a conclusiones sin base científica acreditada. Acá debe hablar la ciencia y tenemos que dejar de especular como lo ha hecho el fiscal en cuanto a acomodar la prueba para efectos de satisfacer su pretensión penal», aseveró Sleman en declaraciones al matinal Mucho Gusto.
Sobre el mismo tema, sostuvo que «hoy el Ministerio Público presionó a las entidades que estudian este caso y así, a nuestro juicio, poder condenar a un inocente».
Consultado sobre la opción que el tío abuelo de Tomas se haya puesto de acuerdo con su familia para dar una versión unificada a lo ocurrido, el abogado fue claro en señalar que «esa situación está resuelta en la PDI con declaraciones de todo el entorno familiar y el imputado. Se realizaron pruebas de telecomunicaciones y georreferenciados en los celulares que determinaron todo el movimiento de mi representado».
Siguiendo con este punto, expresó que «él (Jorge Escobar) sale a las 8 de la noche con Tomas a buscar a los animales y 25 minutos después llama solicitando información de Tomasito. Nunca se acercó siquiera al sitio del hallazgo».
Slime también aclaró el origen del mapa presentado como prueba de la Fiscalía sobre la muerte y desaparición de Tomas Bravo.
«Es el Cuerpo de Bomberos el que le solicita a la familia que hagan un mapa del lugar para efectos de saber qué ocurrió. Ese mapa ni siquiera lo hace mi representado. Lo realiza el hijo, insisto, a petición del Cuerpo de Bomberos. Está acreditado su origen y objetivo», aseveró el abogado defensor.
Sobre los pasos a seguir en este caso, Sleman aseveró que «no tenemos nada claro sobre qué pasó con Tomás desde el punto de vista criminalístico y es clave la prueba científica. Es vital para saber si las lesiones son pre o post mortem».
Estas pericias, indicó el jurista, se basan en diligencias histológicas, biológica y de ADN para determinar «cómo ocurrieron las lesiones y si existe participación de terceros».
Al cierre de sus dichos, Sleman declaró que «hay que esperar. Es una causa que se está investigando. Hay pruebas científicas que son necesarias para determinar si hubo un delito y de ser así, eventualmente el partícipe. «.
