El conductor de la línea matadero don Manuel Henríquez conocido como el «Mulero», fallece en la urgencia del hospital de Talca a la espera de ser atendido, donde acude por sentir un dolor agudo de pecho con irradiación al brazo, náuseas y cefalea.
En dicho centro asistencial le realizaron un electrocardiograma con el cual el médico de turno sin ver al paciente descartó que se tratara de un infarto, y lo envió a esperar a la sala de espera.
En ese lugar el paciente continúa con fuertes dolores, advirtiendo al personal por parte sus familiares, a lo cual la enfermera le indica que no se preocupen que no es un infarto, quedando a la espera con aumento de dolor, hasta que se desvanece en el piso de la sala donde dejó de existir por un paro cardiorrespiratorio.
Los familiares señalan que ante los gritos de ayuda el personal no acudió diligentemente tardando varios minutos solicitandoles datos administrativos para recién pedir una camilla. En ese minuto comenzaron a practicarle una reanimación, con las consecuencias que luego de 30 minutos de intento de reanimarlo el paciente se declaró muerto.
Los familiares sostienen a Diario Atentos que existe una evidente negligencia por hacerlo caminar en esas condiciones hacia la sala de espera, con todos los evidentes síntomas de un infarto u otra afección grave que genera los mismos síntomas por lo cual no puede abandonar el lugar de atención.
Tras la autopsia de rigor los familiares dicen estar aún más convencidos que la víctima no recibió atención oportuna
.Sus restos están siendo velados en la 18 sur # 1412 con 7 oriente, y sus funerales serán el parque las rosas a las 17:00 hrs del día lunes 26.
