Apegados a una ideología añeja, la comisión de Recursos Hídricos, Desertificación y Sequía insiste en seguir votando artículos contra la agricultura chilena. El pasado martes se aprobó el artículo que establece que todos los derechos nuevos tengan caducidad a 30 años.
“El primer problema de esta votación es que los nuevos derechos van a afectar a miles de pequeños y medianos agricultores ya que por tener caducidad no será posible hipotecar los derechos o gravarlos, por lo que no podrán ser garantías ante bancos” afirmó el Presidente de la Multigremial Nacional, Juan Pablo Swett.
Otro de los puntos conflictivos de este artículo es que no considera los tiempos agrícolas. “Un ejemplo es que la CNR exige 10 años mínimos de funcionamiento de un proyecto. Si cuentas la plantación, para que entre en producción y la implementación de los equipos, pueden no dar los plazos para poder pedir un subsidio de riego por caducidad del derecho” afirmó el presidente de la Junta de Vigilancia del Río Maule, Carlos Diez.
Un temor importante es que la caducidad y extinción de los derechos le entregará a la DGA facultades expropiativas que afectarán las certezas de contar con el agua, ya que quedará al arbitrio de la autoridad y gobierno de turno, politizando la entrega y la expropiación de los derechos.
También es relevante considerar que con esta votación se estarían creando dos categorías de derechos de agua en Chile. Al respecto, el presidente de la Junta de Vigilancia del Río Ñuble, Martín Arrau, comentó que “esto implicará la necesidad de dos normativas, dos formas de control y lo más grave: la posibilidad de perder la primera categoría con un derecho permanente, y al apelar obtener un derecho con caducidad”.
Los agricultores seguirán organizando reuniones, movilizándose y con apariciones en la prensa por que necesitan ser escuchados y que su opinión se tome en cuenta, ya que alegan que hoy el gobierno y muchos senadores han hecho el ejercicio de escuchar, pero no han tomado en cuenta su decisión al momento de votar. Ellos sienten que estas modificaciones están destruyendo la agricultura y están dispuestos a seguir defendiéndola.