La brisa dieciochera ya se siente en el ambiente y en la bodega de la familia Muñoz Villalobos, en la localidad de Melozal, comuna de San Javier. Desde hace varias semanas, el grupo familiar trabaja incesantemente en el envasado y etiquetado de su vino pipeño y la chicha dulce, destinadas a abastecer las fondas y celebraciones de fiestas patrias en diferentes puntos de la región.
Verónica Villalobos, una pequeña productora maulina y junto a su marido Mauricio han levantado la viña Lacre Rojo, que partió produciendo solo vinos a granel. Con el tiempo, fueron incursionando en el vino envasado bajo el nombre de su viña y producen vinos cabernet Sauvignon, vinos país y merlot.
Pero en esta época del año, los esfuerzos están concentrados en los brebajes que más se consumen en las fondas. “En esta época estamos abocados a nuestra chicha y pipeño mayoritariamente, para prepararnos para las fiestas. Estos son vinos que producimos nosotros mismos, tenemos el vino pipeño que lo hacemos con uva torontel, es un vino con un dulzor especial para hacer los terremotos y los ponches para ‘el 18’. Y nuestra chicha que la elaboramos con uva país. Para eso se refriega la uva, se guarda la chicha y en esta época se le hace un refermentado, entonces nos queda una chicha dulce, que no es igual a la cocida, es una chica que es como recién elaborada, muy rica”, explica Verónica.
Los productos los venden directamente a los comerciantes en su propia bodega, en otros casos los envían a los supermercados y locales comerciales con quienes tienen nexo comercial, tanto en la región del Maule como fuera de ella.
Para esta temporada, tienen preparados cerca de 10 mil libros de pipeño y otros 10 mil litros de chicha, las que venden en bidones de 5 litros y botellas de litro y medio.
La familia completa trabaja en las distintas tareas que demanda la empresa. Mauricio es el encargado de las viñas y de elaborar los vinos y la chicha.
Verónica está a cargo, junto a sus hijos mayores, del envasado, etiquetado, la promoción y la distribución de los productos. Además es ella la que participa en las ferias y diferentes eventos donde la viña “Lacre Rojo”, exhibe y vende sus vinos al detalle.
Verónica es usuaria del Servicio de Asesoría Técnica de INDAP, participa en el Programa de Asociatividad Económica-PAE- de esta institución del agro y es una de las 11 socias de la recién creada Cooperativa Arteagro, que integran solo mujeres productoras de diferentes rubros productivos de la región del Maule. Posee 5 hectáreas de viñas en plena producción y cuando necesita más materia prima, compra la uva a otros productores de su sector. Posee una sala de ventas y una bodega con capacidad de guarda para 70 mil litros.
“Nuestra localidad, Melozal, es tierra de viñas y buenos vinos. Esperamos que este sea un buen año para nuestra chicha y nuestro pipeño, que son productos totalmente artesanales, que hacemos en familia, con todo el cariño y la experiencia que hemos heredado de mi padre y de mi suegro, antiguos productores de vino. Es un trabajo que hacemos con mucho amor y espero que nos vaya muy bien”, señala la productora.
