“Incremento de la eficiencia y cuidado del agua mediante experiencia conjunta entre comunidades de Sonora, México y Linares, Chile” es el nombre de la iniciativa financiada por la Agencia de Cooperación Internacional Chile- México y uno de los pocos proyectos de esta agencia que se está ejecutando fuera de la Región Metropolitana. Busca comparar dos comunidades ubicadas en dos latitudes distintas del globo, para analizar cómo se realiza el manejo del recurso hídrico en la agricultura, generando un diálogo en conjunto que permita rescatar lo mejor de ambas localidades y así integrar esta estrategia al manejo que se realiza a nivel local.
Samuel Ortega, director del CITRA, se refirió a la relevancia de trabajar en pos de la eficiencia hídrica. “La idea es poder intercambiar conocimiento y experiencia, utilizar tecnología de primera generación y vía satelital, la cual nos permita estudiar a nivel regional cuánta agua necesita el cultivo para su riego”.
La desertificación, progresiva degradación de los suelos y déficit de agua, se encuentra entre los efectos críticos del cambio climático en Chile. Estudios señalan que el 76% de la superficie chilena se ve afectada, donde vive el 65% de la población. Desde las regiones de Coquimbo a Bío-Bío se consignan los síntomas más graves de sequía, desertificación y degradación. Particularmente, la comuna de Linares se encuentra en el área identificada como crítica. “Este proyecto se focalizará en la comuna de Linares obteniendo un impacto regional y a medida que vamos mejorando la tecnología tendrá un impacto nacional”, agrega el Dr. Ortega.
La zona de Sonora, en tanto, presenta oportunidades de intercambio de conocimiento para la gestión del recurso hídrico en condiciones de sequía. En Chile, un aumento de la temperatura de entre 0,5 a 1,5 °C y la disminución de precipitaciones entre 5 y 15%, escenarios de mayor probabilidad hacia el año 2030, intensificándose en años sucesivos y ocasionando pérdida de la biodiversidad, reducción de recurso hídrico y aumento de la demanda atmosférica, situación similar a la que se vive en el territorio mexicano.
Otra arista de este proyecto es la internacionalización de la experiencia, considerando recursos para que los resultados se muestren a nivel internacional. En las siguientes etapas de la iniciativa se realizarán actividades de investigación científica y de transferencia. Las de tipo científico están en curso y dicen relación con la investigación que hace CITRA durante el período de cultivo, a través de ensayos y mediciones. En la parte de extensión y transferencia tecnológica, el proyecto considera tres viajes a México y tres visitas de investigadores mexicanos a Chile. En estas se considera una comisión científica para profundizar en la investigación y una comitiva compuesta por profesores del DAEM de Linares, que van a adquirir competencias en el manejo del recurso hídrico para aplicar en los establecimientos como coordinadores ambientales.
“Serán tres viajes para abarcar el área científica, la educación y la transferencia tecnológica que sin duda traerán consigo muchos beneficios no solo para la comunidad de Linares, si no que para Chile. La idea de este intercambio también se centra con la formación de capital humano, tanto en la Escuela de Agronomía de la UTalca como estudiantes de Postgrado”, concluyó el Dr. Ortega.
Finalmente, el intercambio sociocultural entre ambas localidades permitirá la participación de agricultores, investigadores y educadores mexicanos quienes conocerán las experiencias en nuestro país sobre el consumo del agua para la actividad productiva en este escenario climático. Además, la participación de referentes internacionales genera una instancia en la que jóvenes puedan concientizarse sobre la productividad del agua bien manejada, el ahorro de ésta promoviendo disminuir el impacto del cambio climático en nuestra sociedad.