Este martes, Natalia Guerra, exmiembro de la Secta que operaba en Colliguay y que era liderada por Antares de la Luz y madre del recién nacido que fue quemado vivo por considerar que era el ‘anticristo’, fue detenida por la PDI en Isla de Maipo.
Según Juan Prado, comisario de la PDI, la mujer, condenada por el delito de parricidio a cinco años de presidio menor en su grado máximo sin pena alternativa, se mantuvo prófuga desde 2017, por medio del constante cambio de domicilio y de identidad.
Al respecto, Prado detalló: “Pudimos establecer que efectivamente ella se cambiaba cada un año de domicilio. Siempre ocupaba estas parcelas porque, tenemos prácticamente establecido que seguía con su culto de secta”.
Acerca de la detención de Guerra, además estableció que su captura fue gracias a que «algunos documentos son olvidados por ella en un domicilio que tuvo en Calera de Tango. En virtud de eso, la persona que llegó a arrendar al domicilio encontró estos documentos y nos comunica a nosotros. Es ahí donde establecemos la identidad de la pareja de Natalia y procedemos a hacer el trabajo investigativo con respecto a esta persona. En virtud de ese procedimiento y a los seguimientos que realizamos a esta persona, logramos dar con el domicilio donde se encontraba Natalia”.
Tenía una secta
Pardo además sostuvo que existen «antecedentes que seguía efectuando un tipo de culto muy poco conocido. Nosotros tenemos entendido que se hacían reuniones en la parcela, donde se juntaba gente a seguir un culto determinado”, en ese sentido explicó que “las sectas en Chile no son sancionada solamente por ser secta, sino que tienen que cometer algún delito para que nosotros podamos actuar”.