A sus 37 años Pedro Fuentealba se llevó el susto de su vida, hace una semana supo que estuvo dos semanas combatiendo el sarampión sin ningún tratamiento, solo con sus defensas, pese a que concurrió a la asistencia pública y también en la privada en busca de auxilio médico ya que presentaba fiebre alta, dolor de garganta, conjuntivitis, tos seca, pero fue diagnosticado erróneamente y enviado a su casa junto a su esposa e hija.
Pedro Fuentealba fue diagnosticado el pasado 17 de abril con Sarampión y señala que “estuve tres semanas buscando un diagnóstico y literalmente yendo de médico en médico y sin segar a ningún diagnóstico y menos a un tratamiento, básicamente me tocó pelear solo la enfermedad pero hoy estoy saliendo y mejor. Hoy ya me vio un quinto médico que corrobora lo que dice el médico anterior que yo efectivamente tuve o tengo sarampión”.
Reconoce que fue un peregrinar por centros de salud, ya que ninguno de los tratamientos que le aplicaron daba resultado y su situación empeoraba, fue entonces cuando ya con todos los síntomas e incluso manchas en la piel le diagnosticaron Sarampión.
Fuentealba señaló que los tratamientos paliativos de los diagnósticos erróneos “no generaron un mayor efecto que yo realmente necesitaba, cuando ya realmente la enfermedad se detectó lo que hicieron fue lo paliativo para lo que quedaba y ahora me queda hacer unos días más de reposo y hacer exámenes de evaluación y estar atentos a la sintomatología que pueda presentar mi familia”.
Esta situación dejó al descubierto una preocupante realidad el olvido de los profesionales de los centros asistenciales sobre protocolos de salud para enfermedades que pese a estar erradicadas pueden presentarse -eventualmente- como ocurrió con Pedro Fuentealba, que en el caso de los adultos puede llegar a ser mortal.
La Seremi de Salud Marlenne Durán explica que “como son enfermedades que han estado erradicadas de repente el personal de salud se le olvida un poco preguntar y hacer los exámenes de acuerdo a la sintomatología que ellos (pacientes) presentan… Fiebre sobre 38 grados, conjuntivitis, dolor muscular, inflamación de ganglios y además las típicas manchas rojas que generalmente está de cuatro a siete días presente”. Frente a estos síntomas las personas deben consultar en el centro de salud más cercano.
En este caso el paciente no ha viajado al extranjero que es uno de las formas de contagio de ahí la preocupación de la autoridad sanitaria para detectar el lugar de contagio. Mientras las muestras obtenidas de Fuentealba fueron enviadas al Instituto de Salud Pública para confirmar o descartar el diagnóstico de Sarampión.
