Una mujer en Talca fue formalizada por infanticidio y quedó en prisión preventiva, luego que en su habitación se descubriera el cuerpo de un recién nacido, que correspondería a su hijo, que ella misma habría matado luego del parto.
La imputada fue identificada como Camila Retamal Cáceres, de 21 años, quien a fines de octubre llegó hasta una clínica privada de la ciudad producto de una septicemia y un sangramiento profuso, según informa Radio Bío-Bío.
Allí se concluyó que la mujer habría dado a luz recientemente, por lo que se ordenó una investigación, a cargo de la Brigada de Homicidios (BH) de la PDI, que tras ingresar a su domicilio descubrió el cadáver del bebé debajo de su cama, que habría permanecido tres días en el lugar.
En la pieza también se hallaron píldoras que la joven habría utilizado para inducir el parto, del que nadie en su familia tenía conocimiento, pues lo ocultó durante los casi nueves meses vistiendo ropas anchas.
“Se trata de una mujer joven que ya tenía un hijo, de cinco años, y que ocultó su segundo embarazo a los padres, por miedo a que supuestamente la obligaran a abandonar ese domicilio o bien que le prohibieran ver al otro hijo que ella está criando. (…) Tuvo al bebé en el baño de la casa”, señaló Iván Ortiz, jefe de la BH de la PDI de Talca.
Después de diversas indagaciones, en el Servicio Médico Legal (SML) de Santiago se precisó que la causa de muerte del lactante, de sexo masculino y que nació vivo con 41 semanas de gestación, fue una asfixia causada por estrangulación.
Retamal, luego de dar a luz, habría ahorcado con la manga de una camisa al recién nacido para quitarle la vida.
