A través de un comunicado, la Congregación Hermanas del Buen Samaritano pidió perdón a la exreligiosa Consuelo Gómez, quien denunció en un medio nacional que en su estadía en la institución fue víctima de abusos sexuales.
«Manifestamos con dolor que conocíamos el relato de los graves hechos ocurridos al interior de nuestra comunidad religiosa, las medidas que tomamos y la actitud que tuvimos entonces no estuvieron a la altura de nuestra misión y vocación, a imagen de Jesús», relata el texto.
En las palabras que fueron publicadas en el sitio web de la Conferencia Episcopal, aseguran que «Pedimos perdón a Consuelo Gómez Pinto, nuestra hermana en Cristo. Lo pedimos con humildad y sabiendo que esta petición por sí sola no repara el daño causado«.
De acuerdo a lo expresado, la Madre General, Patricia Ibarra, ha solicitado el inicio de investigación canónica para «revisar las situaciones denunciadas». Además, tomaron contacto con el Consejo Nacional de Prevención de Abusos y con la Comisión Diocesana de Prevención, para llegar a confeccionar un protocolo de prevención para este tipo de conductas.
Además, señalaron que «con pesar, señalamos que no siempre en nuestra comunidad religiosa se ejerció la autoridad correctamente, por este motivo, desde hace dos años iniciamos un proceso de renovación integral de la Congregación».
