Dos veces perdieron sus casas. Primero la de adobe destruida por el terremoto de 2010 y luego la reconstruida en madera, quemada por los incendios forestales de pasado verano.
Las familias de Bóquil, localidad del secano costero a 90 kilómetros de Curicó, han enfrentado la pérdida de sus hogares y enseres en dos ocasiones. Y ahora reinician con entereza una nueva etapa en sus vidas, en casas de albañilería de 65 metros cuadrados construidas por Serviu Maule y entregadas este fin de semana.
Así lo reflejó Rómulo Díaz, pensionado que manifestó su conformidad con la calidad del trabajo realizado por la institución pública.
“La primera me le cayó con el terremoto, pero de esa siquiera salvamos algunas cosas. Pero ahora con el fuego, perdí todo, no saqué nada, nada. Quedé con lo puro puesto. Ahora las casas son muy buenas, muy linda mi casa. Espero ahora qué va a pasar con ésta, me voy a terminar yo y la casa va a quedar”, dijo con alegría el adulto mayor mientras observa con orgullo su plantación de arvejas orgánicas.
Desde la chacra de don Rómulo se divisan las viviendas de emergencia que acogieron por 8 meses a la familia de Sabina Díaz. En medio de ellas, relucientes, su nueva casa y la de su hermana.
“Pal terremoto se demoraron mucho. Pensé que ahora iba a hacer lo mismo. No creí hasta que ya estaba avanzada y me di cuenta que se habían demorado muy poco. Estoy feliz, feliz porque mi casa quedó preciosa. Y ojalá sea la última”, reflexionó la temporera agrícola.
Los nuevos hogares financiados con subsidio estatal, como los que ahora tienen doña Sabina y don Rómulo, ofrecen tres dormitorios, cocina, baño y estar comedor. Además tienen conexión eléctrica, abastecimiento de agua potable, sistema de alcantarillado, cálefon y cerámica en todo el piso, enumeró el Director de Serviu Maule.
“El desarrollo constructivo del proyecto fue relativamente rápido. Nos propusimos entregar con permiso de edificación, aprobaciones sanitarias y con la recepción municipal completa. Las personas están satisfechas, están contentas y se sienten contenidas por la solidaridad del estado chileno”, afirmó con satisfacción Omar Gutiérrez.
FOCO EN LAS FAMILIAS
El actual proceso de reconstrucción rural que llevan a cabo Serviu Maule y otras instituciones privadas está desplegado en un centenar de localidades rurales y ha sido acometido durante los meses de invierno a pesar de las dificultades de acceso.
“Es una dispersión geográfica y territorial de muy difícil acceso. Sin embargo, los pequeños contratistas asumieron este desafío y se vinieron también con nosotros. Es una mancomunión de diversos actores en función de las personas”, destacó Patricio Uribe, encargado regional del Reconstrucción del Ministerio de Vivienda y Urbanismo.
“Hemos trabajado con las personas, dándoles la seguridad que Serviu Maule y el Gobierno de Chile ha estado presente y lo iba a estar hasta el final. Esto es una muestra más que como servicio y ministerio hemos cumplido con las familias en situación de catástrofe”, manifestó la delegada provincial de Serviu Maule, Luzmira Albornoz.
Según los registros de Serviu Maule, a la fecha en los sectores rurales de esta región han sido entregadas 102 viviendas reconstruidas, mientras que otras 169 están con alto grado de avance, lo que augura una rápida solución a las familias afectadas por los incendios forestales.