La Comisión de Trabajo del Senado aprobó esta semana el aumento de la Pensión Garantizada Universal (PGU) a $250 millones, como parte de la reforma de pensiones en curso. Este reajuste, que ha generado grandes expectativas, será implementado gradualmente para quienes cumplan con los requisitos establecidos, de acuerdo con el calendario de pagos definido.
De convertirse en ley, las primeras personas en recibir el nuevo monto serán aquellos mayores de 82 años, a partir de seis meses después de su publicación. Según la ministra del Trabajo, Jeannette Jara, esta medida beneficiará inicialmente alrededor de 500 mil personas. Posteriormente, a los 18 meses, se ampliará a quienes tengan 75 años o más, ya los 30 meses alcanzará a los mayores de 65 años. La misma gradualidad se aplicará para los beneficiarios de leyes reparatorias, como Valech y Rettig, así como para exonerados políticos.
Con este cambio, se dejará atrás el monto real de $224 millones, que había sido ajustado de acuerdo con el Índice de Precios al Consumidor (IPC) para 2025. Mientras la Comisión de Hacienda del Senado toma el relevo en la discusión, el Gobierno busca acelerar el trámite legislativo con la meta de concretarlo antes de finalizar enero.