Siete meses después de la desaparición de María Ercira en un restaurante del Fundo Las Tórtolas, en Limache, la investigación ha tomado un nuevo giro. Según reportes de CHV, las indagatorias se centran en transacciones realizadas desde la cuenta de la desaparecida hacia su nuera, Myriam Ramírez. Estas operaciones, que habrían alcanzado montos de hasta $800 mil en agosto, se realizaron tanto antes como después de la desaparición de Ercira.
En declaraciones a La Radio, Carla Hernández, nieta de María Ercira, explicó que estos movimientos bancarios corresponden a la pensión de su abuela. «Los fondos han sido utilizados para cubrir gastos judiciales», señaló Hernández, quien además reveló que existía un acuerdo informal entre su madre y la desaparecida. Según la nieta, este convenio permitía a Myriam gestionar la pensión de María Ercira desde mucho antes de su desaparición.
Por su parte, Cristián Araos, psicólogo forense y perito MP-Tracker, destacó que este hallazgo podría ser relevante para la investigación, aunque advirtió que podría tratarse de un indicio aislado. «Esto puede dar aportes a la investigación, pero se podría descartar de toda evidencia, ya que yace de un solo indicio e insiste en la participación de terceros», comentó Araos, dejando abierta la posibilidad de que nuevos elementos esclarezcan el caso.