En un video difundido recientemente, la organización radical Weichán Auka Mapu (WAM) admitió que algunos de sus miembros han estado involucrados en delitos graves, como homicidios y tráfico de drogas. En el registro, una persona encapuchada, acompañada de otros individuos y con la voz distorsionada, expresó una autocrítica en nombre del grupo, destacando que estos han empañado su lucha por la recuperación del territorio mapuche.
«Reconocemos hechos innegablemente reales, como la muerte de civiles, el tráfico de drogas y el robo de vehículos, que han enlodado nuestra confrontación digna y autonomista», señala el vídeo. Asimismo, aseguraron que estas prácticas son contrarias a los principios de su organización y atribuyeron su ocurrencia a una falta de disciplina interna y al ambiente de creciente actividad delictiva en la región. También mencionaron que factores externos, como el hostigamiento policial y militar y la presencia de bandas armadas financiadas por empresas forestales, contribuyeron a generar un clima de caos e incertidumbre, especialmente en la provincia de Arauco.
A pesar de las críticas y la crisis interna que han enfrentado, WAM reafirmó su compromiso con lo que consideran sus objetivos fundamentales. «Reafirmamos quiénes son nuestros enemigos: las empresas forestales, grandes latifundistas, proyectos extractivistas y otras amenazas al territorio mapuche», concluyó el registro, subrayando la necesidad de reinventar su camino y recuperar los principios éticos y revolucionarios que fundamentan su lucha.
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