Los voluntarios de la Décima Compañía Bomba Suiza del Cuerpo de Bomberos de Puente Alto se convirtieron en héroes tras salvar la vida de un bebé de tan solo 8 días de nacido, quien había dejado de respirar repentinamente.
Según informó Las Últimas Noticias (LUN), el incidente ocurrió durante la noche del domingo 20 de octubre, cuando Simón Ferrari, capitán de la Bomba Suiza, escuchó el sonido de un vehículo acercándose rápidamente por la calle Los Pinos en el sector de Casas Viejas, tocando la bocina con desesperación.
Ferrari pensó que se trataba de un vecino avisando de una emergencia de incendio. Sin embargo, al acercarse al vehículo, se encontró con una familia en estado de pánico, sosteniendo al pequeño en sus brazos.
«El auto se detuvo justo en el estacionamiento de Bomberos, al mismo tiempo que yo abría la puerta para ver qué sucedía. De repente, bajaron el conductor, el copiloto y una mujer que llevaba a la guagüita en sus brazos, quien había dejado de respirar de manera súbita», relató Ferrari.
El capitán explicó que no alcanzó a entrar al cuartel para avisar a sus compañeros, ya que todos salieron al escuchar el ruido. Su hermano, quien también es teniente de la compañía y técnico en enfermería, fue el primero en recibir al bebé, mientras los demás voluntarios se apresuraban en buscar el tanque de oxígeno y el equipo pediátrico necesario para la emergencia.
«Yo me encargué de ir a buscar los implementos mientras mi hermano tomó al bebé y lo colocó sobre el auto para realizarle compresiones cardíacas con el dedo índice. No nos demoramos nada en preparar el tanque de oxígeno, así que las maniobras de reanimación comenzaron mientras le administrábamos oxígeno», relató.
Ferrari señaló que el lactante respondió en «pocos segundos» a la reanimación. «No lo calculé, pero fueron muy pocos segundos. Tampoco tuvimos tiempo de preguntar más detalles a la familia, porque la ambulancia del Samu llegó rápidamente y, tras estabilizarlo, lo trasladamos al Hospital Sótero del Río», añadió.
El capitán recordó con emoción cómo el pequeño movió sus brazos al comenzar a respirar de nuevo. “No lloró, pero movió sus manos. Al verlo reaccionar, supimos que estaba bien», dijo.
Ferrari destacó la preparación de los bomberos para enfrentar estas situaciones: «Todos los voluntarios de Bomberos estamos capacitados en reanimación, es un requisito».